El error estratégico de Milei al alinearse con EEUU
El fiasco de la sumisión a Trump, cuando China es el principal socio comercial
Claudio della Croce
La apuesta del gobierno de Milei por un rescate de Donald Trump y Scott Bessent, su Secretario del Tesoro y hombre de su máxima confianza, condiciona la política interna argentina de cara a las elecciones legislativas de medio término del próximo domingo, mientras China aumenta su comercio con Argentina, mostrando que el alineamiento estadounidense es un error estratégico que limita autonomía y proyección económica futura.La dependencia económica se traduce así en subordinación política.
El apoyo estadounidense al gobierno ultraderechista de Javier Milei implica un costo estratégico porque, en el mediano y largo plazo, debilita la autonomía de la Argentina y la ata a un bloque en retroceso. En principio, el gobierno quiso convertir estas elecciones de medio término en un plebiscito de su plan de ajuste, preparando para el día después, un nuevo gobierno de coalición, con sectores de la derecha, de lo que queda del neoliberal PRO del expresidente Mauricio Macri, lo que, de hecho, es reconocer su propio fracaso.


Una tarea difícil cuando también debe reorganizar su gobierno. Ya antes de las elecciones legislativas renunció el canciller Gerardo Wertheim, agudizando la crisis de gobierno. Dejó trascender sus diferencias con el asesor «estrella» del gobierno, Santiago Caputo, quien lo responsabilizó por no lograr una reunión bilateral con el presidente estadounidense Donald Trump.

La crisis se siente cada vez más en la población. Aun teniendo empleo, el 21,6% de los ocupados no logra superar la línea de pobreza. Un informe del Instituto de Estudios sobre la Realidad Argentina y Latinoamericana (IERAL) advierte que, la precarización y la informalidad explican gran parte de la persistencia de la pobreza laboral, que alcanza a 1 de cada 5 trabajadores.
Mientras Milei se emociona hasta las lágrimas con una foto con Trump y celebra el apoyo de Bessent, el comercio exterior argentino se acerca cada vez más a China. El último informe de la consultora ABECEB reveló que, por primera vez en el año, China desplazó a Brasil como principal socio comercial de la Argentina. A setiembre, las exportaciones a China aumentaron el extraordinario 201,7% interanual, impulsadas por embarques de soja. Al mismo tiempo, las importaciones desde China alcanzaron un récord histórico de 1816 millones de dólares, especialmente en bienes de consumo y vehículos eléctricos, con fuerte participación de marcas como BYD.
*Economista y docente argentino, investigador asociado al Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico (CLAE, www.estrategia.la)