Milei en la CPAC: La ultraderecha va por la batalla cultural

Álvaro Verzi Rangel

El presidentes argentino Javier Milei dio el discurso de cierre de la  Conferencia de Acción Política Conservadora (CPAC) Argentina,  al que no asistieron figuras de renombre pero sí cientos de referentes de derecha de Estados Unidos, México, España, Brasil y Argentina, entre otros países: apuntó contra la Izquierda y  contra presidentes y expresidentes de la región, con algunos de los cuales deberá verse este viernes en la cumbre del Mercosur en Montevideo.

Con un discurso violento, defendió su gestión y destacó por sobre todas las cosas la “batalla cultural” contra «los zurdos de mierda» que está llevando adelante su proyecto de ultraderecha. Para ese fin, Milei, propuso una serie de mandamientos para perseguir, denostar, censurar y reprimir a todos aquellos que quieran ponerle límites al gran capital y luchar por sus derechos. Enfatizó en que “la única forma de combatir al socialismo es desde la derecha”, apuntando contra los gobiernos capitalistas con discurso “progresista”, que «permiten que avance el comunismo».

La cumbre de la extrema derecha mundial comenzó con el himno argentino, pero también con el estadounidense, faltaba más. Luego, siguió con la conductora del evento pidiendo aplausos para los Estados Unidos, Argentina e Israel. No participaron Donald Trump, ni Elon Musk, más allá de que Milei los había invitado personalmente, y tampoco hubo grandes figuras. La sala presentaba muchas sillas vacías.

A días de que se cumpla su primer año al frente del gobierno, La Libertad Avanza de Milei copia el discurso de los think thank estadounidenses con la esperanza de ser beneficiados por la gestión de Trump que asume en enero de 2025.. “CPAC nos permite organizarnos internacionalmente para que los zurdos no nos entren por ningún lado” dijo Mlei con palabras entrecortadas durante una la lectura del documento .

Milei atacó nuevamente a los periodistas, que no dejó entrar al evento, y  pronunció más de una amenaza para el arco político que está «del lado del mal»: el supuesto «centrismo bien pensante». A ellos les dijo que está vedado cualquier tipo de diálogo y de consenso con él: «Si no pensábamos negociar antes;ahora que los resultados acompañan, menos». «Van a llorar y a decir que soy totalitario, ya no me importa», confesó en la CPAC.

Vanidoso, Milei subrayó: «ellos fueron exitosos en lo cultural y político, pero como sus ideas son un espanto abrieron la posibilidad de que, de la mano de Trump, de Nayib Bukele y de nosotros, en el mundo se respiren nuevos aires de libertad». Luego de criticar a los políticos, a los que llamó «colonia de leprosos», y a los «periodistas ensobrados», aclaró que él no era político y que despreciaba a la política. Luego, de manera contradictoria, empezó a desglosar un «decálogo» de cómo él y su gobierno «enfocan la política».

«Necesitamos proteger la cabeza, sus ideas, porque si se fortalecen el cuerpo, pero no las ideas, las fieras los van a comer igual. Justamente eso hace CPAC, cuida la cabeza, son los guardianes de las ideas”, dijo Milei. .Asimismo, Luis Caputo, ministro de Economía, señaló que “La batalla cultural de Milei nos ayuda para atraer inversores”

«A un enemigo bien organizado, la única forma de combatirlo es desde la derecha. Todos los tibios que quieren ir por el medio. lo único que hacen es darle terreno a la izquierda», remarcó y sumó, en tono más beligerante: «Si le van con las buenas formitas los van a pasar por arriba y no nos vamos a dejar pasar por arriba.  Hay que subir la apuesta». djo el mandatario argentino.

Entre sus enemigos incluyó a los socialistas, a los que calificó como «zurdos, intelectuales, imbéciles y arrogantes», y añadió que «ellos avanzaron sobre un terreno virgen en las universidades, escuelas y la cultura porque nosotros nos retiramos». Allí cuestionó a los distintos gobiernos de la región sin pelos en la lengua y criticó a presidentes pasados, pero también actuales como Gabriel Boric de Chile, Lula Da Silva de Brasil, Gustavo Petro de Colombia y a Nicolás Maduro de Venezuela al que calificó de «asesino criminal»

La exposición de Milei fue poco después del panel “La batalla cultural de La Libertad Avanza”,, cuando dijo que «nos importa un rábano la opinión de los políticos sobre casi todos los temas» y añadió: “defendemos la vida, la propiedad y la libertad a rajatabla. Las ideas no se negocian”.

Participaron del acto, entre otros,   Ron Paul, el “padre” del movimiento Tea Party, sector del Partido Republicano que promueve una fuerte oposición al gasto público y a la expansión del gobierno. También Lara Trump, nuera del presidente electo de Estados Unidos y una de las más influyentes dentro del círculo cercano de la familia; el periodista y referente sionista Ben Shapiro. Además,  el franquista y jefe del partido Vox, de España, Santiago Abascal, y reconocidos  reaccionarios de Europa y Latinoamérica.

El diputado federal brasileño Eduardo Bolsonaro , hijo del expresidente Jair Bolsonaro, consideró que “la izquierda ya no toma el poder a través de las armas y de la violencia, sino convirtiendo en inelegibles a sus opositores”, y agradeció a Lara Trump, nuera del futuro presidente de Estados Unidos, sus declaraciones de apoyo a su padre, quien enfrenta acusaciones de la Justicia.

Jair Bolsonaro envió un video, en el que  intentó dar un giro extraño del intento de golpe de Estado y dijo que “lo que pasó el 8 de enero no fue programado por la derecha, sino por la izquierda», y le agradeció a Milei por «refugiar en la Argentina a perseguidos políticos».

El estratega estadounidense Steve Bannon, impulsor de la ultraderechista Red Atlas tamién respaldó a Milei en mensajes grabados: “Argentina es la punta de lanza contra la izquierda”, aseguró Bannon. “El destino de Sudamérica está en las manos de Javier Milei en esta causa global en la lucha contra los movimientos populares”, dijo.

Mientras, el ultraderechista empresario mexicano, Ricardo Salinas Pliego, dueño del conglomerado TV Azteca, uno de los oradores principales , dijo que  “Hay que dar la batalla cultural” y Rafael López Aliaga, alcalde de Lima, destacó la adhesión que genera Milei en su país. “Tiene millones de seguidores, gente joven, de 40 años para abajo. Vengo a invitarlo a Perú para darle las llaves de la ciudad de Lima, y así hermanar aún más a los países”, adelantó el intendente peruano.

López Aliaga denunció que hubo fraude en las elecciones presidenciales de su país y lo atribuyó a “una táctica de la izquierda” . Compartió panel con Fernando Sánchez Ossa, diputado del Partido Republicano de Chile y Pablo Viana, diputado del Partido Nacional de Uruguay.

No sorprendió el mensaje de la autodefinida con máxima dirigente de la oposición venezolana, María Corina Machado, quien aseguró que «Venezuela será libre y una gran aliada de las democracias”,  desde un lugar que no se dio a conocer “por temor a la persecución” .“Vamos a convertir a Venezuela en el hub energético de las Américas. Lo podemos hacer pronto. Nunca nos vamos a rendir. Venezuela será libre y un gran aliado de las democracias”, finalizó.

Para cerrar su discurso, Milei hizo algo insólito: citó a Lenin (quizás sin saberlo). “Sin teoría revolucionaria, tampoco puede haber movimiento revolucionario”, puntualizó y propuso crear «una internacional derechista», es decir –agregó– «una red de asistencia mutua para defender por el mundo las ideas de la libertad.

*Sociólogo  y analista internacional, Codirector del Observatorio en Comunicación y Democracia y analista seniordel Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico (CLAE, www.estrategia.la)