Guaidó dilapidó 150 millones de dólares de recursos bloqueados por EEUU y la UE

Victoria Korn

Juan Guaidó, el autoproclamado presidente del farsesco «gobierno interino» en Venezuela durante casi cuatro años, digitado y promocionado por Estados Unidos, admitió que gastó 150 millones de dólares durante «su mandato», dinero público bloqueado por sanciones internacionales de Estados Unidos y la Unión Europea, y puesto en sus manos supuestamente para derrocar el gobierno constitucional.

En una rendición de cuentas que ofreció en Caracas, y en un intento de mantenerse en los medios, dio unos pocos detalles sobre estos manejos, que ahora deben revisados por la oposición. La cifra parece exigua tras las relevaciones del exsecretario de Estado de EEUU, Mike Pompeo, quien afirmó que “Trump contempló invadir Venezuela y entregó mil millones de dólares a la oposición para ayuda humanitaria”.

Pompeo señaló en su recién libro – Never give an inch. Fighting for the America I Love (Nunca cedas una milímetro: Luchando por la América que amo)-, que Estados Unidos montó una campaña de presión sobre el gobierno de Maduro en concierto con aliados, lo que habla de la inversión millonaria para lograr este cometido. ”El dinero era solo una forma de nuestro apoyo», afirmó.

Siguiendo el plan, se gestaron sanciones contra PDVSA y se confiscaron activos venezolanos, hasta cortar la capacidad de Venezuela para «exportar sus principales generadores de dinero, el petróleo y el oro», dijo Pompeo, exdirector de la CIA.

«Esperábamos hacerle la vida tan miserable al régimen, que Maduro y sus matones tuvieran que hacer un trato con la oposición», explicó Pompeo. Siguiendo el plan, se gestaron sanciones contra PDVSA y se confiscaron activos venezolanos, hasta cortar la capacidad de Venezuela para «exportar sus principales generadores de dinero, el petróleo y el oro», dijo Pompeo.

El total de pérdidas económicas de Venezuela debido a las sanciones de Estados Unidos solo entre 2015 y 2018 se estiman en 130.000 millones de dólares. Desde 1999, cuando asumió Hugo Chávez la presidencia, Venezuela fue víctima de sistemáticas agresiones por parte de los gobiernos de EEUU como el sabotaje, en 2002, contra la principal industria, Petróleos de Venezuela, que genera el 98% de los ingresos en divisas y cuya paralización significó una pérdida de 16.000 millones de dólares.

El supuesto gobierno “interino” de Guaidó debía haber servido para desalojar al gobierno constitucional y dejar en manos de EEUU –y quizás algún aliado europeo- las riquezas petrolíferas y mineras del país, blandiendo el viejo estribillo de “defensa de la democracia” y de “lucha contra el comunismo”.

A este plan de Washington se plegaron varios mandatarios derechistas de la región, que formaron el Grupo de Lima para acompañar esas intentonas. Y algunos de ellos también ayudaron a financiarlo, a la espera de una futura retribución.

Guaidó remarcó que los gastos fueron autorizados «por unanimidad» por los exdiputados opositores elegidos en 2015, cuyo período venció en enero de 2021. «Uno pudiera decir (que) es mucho (o) es poco. (Pero), ¿cuánto es esto para defender la democracia, para recuperar y enfrentarnos a una dictadura?», prosiguió el autoproclamado presidente interino en enero de 2019 -cuando era líder del Parlamento-, en desconocimiento de la legitimidad del presidente constitucional Nicolás Maduro.

Entre los detalles aportados, y sin ningún pudor, dijo que el 70% del presupuesto fue para la entrega de bonificaciones a trabajadores sanitarios que trabajaron en la contención de la pandemia por covid-19. Guaidó no tenía relación alguna con ellos.

Añadió que «casi el 50 % fue destinado a ayuda social» y para el «sostenimiento» del parlamento paralelo. Obviamente no explicó el tipo de ayuda social brindada durante ese año, a menos que haya sido a dirigentes de la oposición, sus familias, y su dispensioso estilo de vida tanto en Venezuela como en sus “exilios”en EEUU y Europa.

Tampoco dijo cuánto dinero se destinó a pagar los salarios de ese interinato, que contó con el reconocimiento de Estados Unidos y unos 50 países, aunque se infiere que esos aportes fueron proporcionados directamente por el gobierno de Washington..

Pero en los primeros días de 2023, tras cuatro años de la puesta en marcha del farsesco fracaso. el Departamento de Estado de Estados Unidos anunció que no reconocía la «presidencia interina» de Juan Guaidó, quien por presión de Washington fue reconocido por decenas de países que consideraban que el gobierno de Maduro era ilegítimo, pese a ganar las elecciones democráticas con participación opositora.

Cuando asumió su mandato paralelo denunciaba una «usurpación del poder» por parte de Maduro, y prometía un gobierno de transición y elecciones libres. Sin embargo, el objetivo de sacar del poder al presidente no funcionó, pero sí el de apoderarse de los fondos del Estado venezolano en el exterior, con la ayuda de EEUU y la UE.

Por 72 votos a favor, 29 en contra y ocho abstenciones, la oposición -liderada por los partidos Primero Justicia, Acción Democrática y Un Nuevo Tiempo- decidió días atrás que Guaidó no continuará al frente de la inexistente presidencia interina de Venezuela.

En el 2019, en medio de una crisis política, el expresidente ultraderechista colombiano Iván Duque entregó la tutela de Monómeros a Guaidó, cuyos gerentes se dedicaron al desmantelamiento de esta empresa. En 2018 esta filial de la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA) producía 860.000 toneladas de fertilizantes, y en el 2019 solo contaba con el 22% de su capacidad operativa.

En setiembre último, el gobierno de Gustavo Petro le devolvió el control de la compañía Monómeros al gobierno venezolano. “El presidente, al reconocer a Maduro, reconoce que el dueño es el Gobierno venezolano”, anunció Armando Benedetti, embajador de Colombia en Venezuela

La oposición se apropió también de las finanzas de la empresa Citgo, filial de la estatal venezolana PDVSA en EEUU; así como del oro depositado en el Banco de Inglaterra y del avión de Emtrasur retenido en Argentina.

Desde 2019, cuando Guaidó se autoproclamó ‘presidente encargado’ de Venezuela avalado por Washington, los venezolanos han pagado más de 34.000 dólares mensuales para solventar una estructura de gobierno de cerca de 100 personas, reveló en noviembre último el partido opositor Avanzada Progresista, que ha denunciado el uso indiscriminado de fondos de Venezuela en el exterior apropiados por Guaidó y su gobierno ‘paralelo’.

*Periodista venezolana, analista de temas de Centroamérica y el Caribe,  asociada al Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico (CLAE, www.estrategia.la)