El litio la reserva del Estado y su utilidad pública, paso histórico en México
Gerardo Villagrán del Corral
En sólo dos horas y 15 minutos, y en ausencia de la oposición que abandonó el salón de sesiones, la Cámara de Diputados mexicana aprobó con 298 votos en favor la reforma a la ley minera, que declara como de utilidad pública el litio y reserva para el Estado mexicano su exploración, explotación, beneficio y aprovechamiento.
Desde fuera del salón y a través de sus teléfonos móviles, otros 196 legisladores de los partidos Acción Nacional (PAN), Revolucionario Institucional (PRI) y de la Revolución Democrática (PRD) votaron en abstención.
Un día antes, en la Cámara de Diputados la oposición política había logrado una victoria pírrica: impedir la aprobación del dictamen de reforma constitucional para modificar los términos de la industria eléctrica en favor de la nación y en perjuicio de los grandes consorcios energéticos que han obtenido beneficios multimillonarios a costa de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
“El domingo en la Cámara de Diputados se cometió un acto de traición a México por parte de un grupo de legisladores vendepatria, francos defensores de empresas extranjeras que se dedican a medrar, a robar, y respaldaron a los saqueadores”, dijo el presidente Andrés Manuel López Obrador, quien añadió que tras la ambición se encuentran los fondos de inversión que dominan en el mundo y los partidos políticos que están a su servicio
El presidente negó que el voto en contra de la reforma eléctrica sea un descalabro, y sostuvo que lo del domingo “no fue revés, sino un éxito, es espléndido, donde los que se dicen representantes populares votan por (la trasnacional española) Iberdrola; no le tienen amor al pueblo y, como dice la canción de Rubén Blades, el que no quiere a su patria no quiere a su madre”.
Fue una victoria pírrica, porque ya la ley secundaria en materia de electricidad –que al principio del actual sexenio fue objeto de múltiples amparos por parte de esos mismos consorcios– había sido declarada constitucional por un fallo dividido de la Suprema Corte de la Nación (SCJN), la cual desechó además una controversia interpuesta por la Comisión Federal de Competencia Económica. Aunque a los grandes generadores privados les quedan algunos subterfugios legales, la llamada Ley Eléctrica puede ser aplicada por el Ejecutivo federal para frenar el saqueo.
El litio
La reserva del litio y otros minerales estratégicos, un aspecto adicional de la reforma eléctrica, fue aprobada en lo general por mayoría simple en Diputados y declara de utilidad pública la exploración, explotación y aprovechamiento del litio, por lo que no se otorgarán concesiones, licencias, contratos, permisos, asignaciones o autorizaciones y establece que el mineral es patrimonio de la nación y su exploración, exportación y aprovechamiento se reserva para beneficio exclusivo del pueblo de México.
La iniciativa consideraba inicialmente como deber del Estado la protección de los pueblos originarios durante los procesos de exploración, explotación y aprovechamiento del litio y de sus cadenas de valor. Se cambió el texto, para que, en lugar de pueblos originarios, se defina a los pueblos y comunidades indígenas y afromexicanos.
Para administrar y controlar las cadenas de valor económico del litio a nombre del Estado, el gobierno federal creará un organismo público y se prevé que, para la ubicación y reconocimiento de las áreas geológicas en las que existan reservas probables del mineral, será auxiliado por el Servicio Geológico Mexicano.
En su conferencia matutina del lunes, el presidente informó que su gobierno analiza la creación de una empresa pública dedicada a la investigación, prospección, explotación, procesamiento y comercialización del litio.
Recordó que este insumo ha adquirido ya una enorme relevancia para el transporte eléctrico y las tecnologías digitales, así como su importancia en cualquier programa de transición energética a fuentes limpias y renovables, para las cuales es indispensable un medio seguro de almacenamiento de electricidad, habida cuenta de su alto margen de intermitencia.
De acuerdo con las proyecciones más sólidas, el litio será cada vez más relevante en prácticamente todos los tramos de la industria, lo que ha planteado ya presiones de diversos conglomerados industriales, sobre todo extranjeros, con el fin de apoderarse de los yacimientos mexicanos.
En este marco, las ambiciones sobre las reservas nacionales de este mineral introducen amenazas a la soberanía y la seguridad nacional, así como el riesgo de un saqueo descontrolado que acabaría dejando sin litio a la industria local. Un editorial del diario La Jornada, señala que “no es exagerado afirmar que ayer se dio un paso histórico y sumamente positivo para México”.
López Obrador recordó que en el sexenio anterior, el gobierno de Enrique Peña Nieto otorgó concesiones a empresas privadas de Canadá, Estados Unidos, Inglaterra y China para la explotación de litio en México que abarcan 159 mil hectáreas. Dijo que el valor del litio al 5 de abril de 2022 era de 78 mil 66 dólares por tonelada, mientras al 31 de diciembre de 2020 fue de 7 mil 145 dólares, es decir, el valor del litio creció 11 veces en tan sólo 16 meses.
Desde el sector empresarial, vinculado a las trasnacionales, se señaló que la restricción en la explotación del litio hará que el Estado mexicano requiera de millones de dólares de riesgo para investigar y explorar este mineral. La Asociación de Ingenieros de Minas, Metalurgias y Geólogos de México indicó que el Estado requerirá millones de dólares de riesgo para investigar, explorar y avanzar en los trabajos de explotación y posteriormente para el aprovechamiento del litio.
Añadió que la extracción de litio de México presenta los mayores retos, ya que se encuentra en yacimientos de arcilla, prácticamente presentes solo en el estado de Sonora, que contienen una concentración de apenas 0.001% de litio por cada tonelada, contra el 0.1% de los yacimientos salares –presentes en Argentina, Bolivia y Chile–, y el 5% en los tradicionales de roca, comunes en Estados Unidos y Australia, por ejemplo.
Según datos del Servicio Geológico de Estados Unidos, México cuenta con reservas de litio por 1.7 millones de toneladas, colocando al país en el noveno en el tablero de reservas mundiales, muy por debajo de Bolivia, con 21 millones de toneladas, y Argentina, con 19.3 millones.
Actualmente, los usos del litio en México se enfocan en baterías recargables para autos eléctricos, teléfonos móviles y paneles solares; no obstante, también tiene un fuerte impacto en la industria cerámica, vidrio-cerámica, lubricantes, polímeros, metalurgia de polvos, vidrio y tratamiento de aire. Mientras, el cloruro de litio se usa para soldadura en piezas de automóviles, producción de metal de litio, mientras el bromuro de litio es empleado en sistemas de aire acondicionado y tratamientos médicos y fármacos.
* Antropólogo y economista mexicano, asociado al Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico (CLAE)
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