El canciller argentino intentó involucrar al gobierno de Biden en la negociación con el FMI

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Rodoldo Koé Gutiérrez

Tras su visita de 48 horas a Washington, el canciller argentino Santiago Cafiero no logró dilucidar si la administración de Joseph Biden apoyará a la Argentina ante el Fondo Monetario Internacional o mantendrá la posición del Departamento del Tesoro, que podría originar el fracaso de las negociaciones que se vienen sucediendo para la reestructuración de 44 mil millones de dólares de su voluminosa deuda externa.

Cafiero fue recibido sucesivamente por el secretario de Estado Anthony Blinken; por la titular de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, y cenó con el director para América Latina del Consejo de Seguridad Nacional, Juan González.Cafiero planteó a Pelosi la necesidad de equilibrio de balanza comercial  entre Argentina y EE.UU. - Impulsobaires

Tras la reuniones de los funcionarios diplomáticos argentinos con los estadounidenses por las negociaciones con el Fondo Monetario, el presidente Joe Biden habló de la Argentina sin ofrecer ninguna definición sobre el asunto pero dejó claro que lo que ocurre en el país está en la agenda de Washington y sostuvo que Estados Unidos “no dicta lo que pasa” en Sudamérica.

América del sur “no es el patio trasero” de Estados Unidos, afirmó el mandatario norteamericano. La referencia a la Argentina ocurrió durante una conferencia de prensa y en momentos en que se hablaba de las democracias en la región y en la que Biden volvió a condenar al Gobierno de Nicolás Maduro como “una dictadura”.

Lo que hizo Biden fue una crítica a la forma en que la administración Trump se relacionó con América latina. “El problema es que hemos tenido grandes dificultades por los errores cometidos en los últimos cuatro años y eso llevará un tiempo” recomponer, afirmó el mandatario estadounidense.

“Estoy conforme con los resultados de la gira. Se logró el apoyo contundente del ala política del gobierno de Biden”, comentó el canciller a sus asesores y agregó que “No puedo saber cómo resultara este apoyo. Pero el crédito fue una decisión política de Trump en favor de Macri, y ahora ya no hay duda que la solución tiene que ser política”, señala Infobae.

Presionando un apoyo

El funcionario de Joe Biden a Santiago Cafiero: “La Argentina es un amigo y  socio” | TNEl canciller tenía la instrucción presidencial de obtener la participación del ala política de la Casa Blanca en las conversaciones con el Fondo, pero eso no implica que la Secretaría del Tesoro haya desistido de los cuestionamientos técnicos que presentó contra la propuesta económica del ministro de Economía Martín Guzmán.

 «Es necesario un mensaje de la autoridad política al Tesoro para contar con el apoyo de Estados Unidos en el Fondo Monetario Internacional, y que de este modo no se restrinja el crecimiento de la Argentina», señaló la cancillería argentina en un comunicado, al término de la reunión con Blinken.

El Departamento de Estado fue ambiguo y escueto, alimentando las especulaciones sobre un virtual estancamiento de la negociación. El portavoz Ned Price detalló que Blinken «discutió la negociación de Argentina con el FMI y alentó a Argentina a presentar un marco de política económica sólido que devuelva el crecimiento al país», repitiendo la exigencia de la Secretaría del Tesoro y de los funcionarios de Biden que visitaron Buenos Aires.

Obviamente, una comunicación formal del Departamento de Estado no pude desautorizar a otra área, la Secretaría del Tesoro –en manos de Yaneth Yell y su asesor y ex número uno del FMI, David Lipton- considerado el sector más duro de la administración demócrata. Lipton se opuso en la era Trump a respaldar el préstamo al gobierno argentino de Macri, pero cambió de opinión cuando el magnate le hizo valer su poder.Yellen advierte que EEUU podría entrar pronto en suspensión de pagos de  deuda

Si bien la gestión argentina ante las autoridades estadounidenses no se ve fácil, éstas son conscientes de que el camino que elijan será determinante para el futuro de la relación bilateral, en un momento donde el gobierno de Alberto Fernández  revisa las posibilidades de profundizar el vínculo con China, lo que es un límite para la tolerancia que comparten republicanos y demócratas respecto a lo que consideran su patio trasero.

Joe Biden sabe que en los próximos dos meses deberá reanudar o desanudar la inflexión previa que le dejó su antecesor, Donald Trump, cuando decidió utilizar la mayoría accionaria que Estados Unidos tiene en el directorio del Fondo para otorgarle el dscomunal préstamo al gobierno neoliberal de Mauricio Macri, que terminó en la hipoteca del país yg la fuga de capitales a los paraísos fiscales.

Al menos, dicen en la cancillería argentina, un Blinken preocupado por el apoyo militar a Ucrania, en el marco de la OTAN, que aumenta la tensión bélica con Rusia, tuvo tiempo para hablar con Cafiero. Justament es Rusia el país que el presidente Alberto Fernández visitará en los primeros días de febrero para reunirse con su par Vladimir Putin. Luego seguirá hasta Beijing para encontrarse con Xi Jinping.

Blinken dijo a los funcionarios argentinos no sólo que apoya las negociaciones con el FMI y que esperan una «resolución positiva», sino que definió al crecimiento del año pasado como «impresionante, muy importante”. Tras la reunión  sólo hablaron de “una economía vibrante” y un crecimiento “vital para el hemisferio y también para Estados Unidos».

La cancillería argentina evaluó que las declaraciones posteriores de Price no fueron tan ambiguas, ya que bien podría haber omitido hablar de las negociaciones. Cafiero pidió a Blinken definir si le dará rienda suelta a la intransigencia técnica de Yellen y Lipton o si tomará una decisión política. Argentina necesita «crecer para poder pagar», añdió.

Santiago Cafiero en Washington: La apuesta a la política para acordar con  el FMI | Reuniones con el Departamento de Estado | Página12Según Tiempo Argenitno, Blinken también fue franco por un momento y reconoció que el principal problema de la relación bilateral es por el préstamo que le concedió la gestión anterior, es decir Trump, a la Argentina, lo que revela que Biden asume que la densidad del vínculo estará condicionado por la decisión estrictamente política, y no técnica, que asumió el magnate republicano que lo antecedió en la Casa Blanca.

Así como el Pentágono está jugado en evitar la expansión marítima china, el Departamento de Estado no quita su atención sobre las inversiones orientales y se pregunta con detenimiento por el rol que tendrá Argentina al frente del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, cuando Washington volverá a poner a un representante y revertirá la decisión de Trump de retirarse.

Los cancilleres también hablaron de la presidencia de Fernández al frente de la CELAC y no hubo detalles sobre los enfoques respecto a Venezuela, Cuba y Nicaragua, aunque serán tres temas determinantes en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU.

Los costos argentinos

Los costos que podría afrontar Fernández a cambio de un apoyo de Biden en el FMI no es desconocida. Cafiero llegó a Washington luego de dos visitas a Buenos Aires del consejero González y de su jefe, Jake Sullivan quienes también hablaron de la tecnología china 5G, de la agenda del Comando Sur y del rol que esperan de Argentina en la región para asuntos urgentes como Venezuela y como contrapeso del presidente ultraderechista de Brasil Jair Bolsonaro, de pésima relación con los demócratas.

Cafiero también fue recibido por Pelosi en el Capitolio. Con ella, Cafiero habló para buscar formas de revertir los El canciller Santiago Cafiero y el embajador argentino en Estados Unidos, Jorge Argüello.aranceles del 150% que le impuso Trump a las exportaciones argentinas de biodiesel. La medida implicó el cierre de ingresos anuales por 1.000 millones de dólares para el sector. Hasta ahora no hay señales de cambios, porque la Argentina perdió a fines del año pasado un recurso administrativo presentado ante el Departamento de Comercio para impugnar esos castigos antidumping.

La cena privada de Cafiero con González fue en la sede diplomática argentina en Washington, y estuvo concentrada en el temario que el enviado de Biden les anticipó el año pasado al Presidente, al titular de la Cámara baja Sergio Massa y al secretario de Asuntos Estratégicos, Gustavo Béliz.

El consejero para América Latina llegó secundado por los tres funcionarios de Blinken que siguen el caso argentino: el subsecretario de la Oficina para el Hemisferio Occidental, Brian Nichols, y Ricardo Zuñiga, su antecesor en el mismo cargo hasta el año pasado, que ahora es el encargado para temas migratorios del Triángulo Norte. A ellos se sumó Kevin O’Reilly, que estuvo en el mismo puesto durante la era Trump y formó parte de la operación que derivó en el respaldo al crédito del FMI.

Repercusión en Buenos Aires

Gabriela Cerrutti le respondió a Larreta: "No queda claro si es un  diagnóstico de la oposición o un deseo" | PerfilLa portavoz de la Presidencia argentina, Gabriela Cerruti, aclaró que “Estados Unidos no le exigió un plan económico” al gobierno de Alberto Fernández y la relacionó con la definición de Biden, de que su administración “no dicta” lo que ocurre en Sudamérica. Dijo que en la reunión entre Cafiero y Blinken “se acordaron una cantidad de posturas con Estados Unidos, que reconoce el crecimiento interanual de Argentina, que no se registraba desde hace tiempo en Argentina”.

“La conversaciones siempre avanzan y entendemos que el viaje del canciller Cafiero fue en el sentido de profundizar las relaciones”, pero en esas charlas Estados Unidos “no pidió ajuste ni un plan económico” a la Argentina, ratificó. Según dijo, “fueron conversaciones políticas donde se habló que había un crecimiento vigoroso de la economía y que tenemos que seguir en esa senda”.

*Periodista económico argentino, analista asociado a al Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico (CLAE)

 

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