Las agresiones de EEUU a Venezuela desestabilizan a toda la región
¿Es eso lo que quiere Trump con el ataque a petroleros?
Álvaro Verzi Rangel
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, envió una carta a todos los jefes de Estado y de gobierno de América Latina y el Caribe, así como a los países que integran el sistema de la Organización de Naciones Unidas (ONU), para advertir sobre “una escalada de agresiones de extrema gravedad por parte del gobierno de Estados Unidos”. Resaltó que los efectos de las acciones de Washington trascienden a Venezuela, amenazan con desestabilizar a toda la región y al sistema internacional en su conjunto.
El mandatario hizo un llamado a los gobiernos del mundo a condenar explícitamente las acciones de agresión, piratería y ejecuciones extrajudiciales cometidas por Estados Unidos, así como a exigir el cese inmediato del despliegue militar, el bloqueo y los ataques armados en el Caribe.
En la misiva, Maduro enfatizó que la operación Lanza del Sur, activada por el Departamento de Defensa de Estados Unidos, constituye una amenaza directa del uso de la fuerza, prohibida por el artículo 2, numeral 4, de la Carta de Naciones Unidas. Asimismo, vulnera la declaración de América Latina y el Caribe como zona de paz, firmada por todos los países de la Celac en 2014, y el Tratado de Tlatelolco, que determina a la región como libre de armas nucleares.
“Venezuela no ha cometido acto alguno que justifique esta intimidación militar”, afirmó el mandatario en el texto, que contabilizó 28 ataques armados perpetrados por fuerzas estadunidenses en el Caribe y el Pacífico oriental contra embarcaciones civiles. El saldo es de 104 personas ejecutadas extrajudicialmente, “muchas de ellas en condición de naufragio”, denunció Maduro en el documento leído este lunes por el canciller venezolano, Yván Gil.
Maduro también denunció que EEUU cometió el secuestro y robo en alta mar de dos buques con petróleo venezolano, aproximadamente cuatro millones de barriles, además de decretar un bloqueo contra las exportaciones venezolanas del energético. Caracas aseveró que estas acciones constituyen, de acuerdo al derecho internacional, actos de piratería.
En su escrito, el mandatario venezolano apeló a la historia para alertar que la inacción de la comunidad internacional ante la agresión y el desprecio por el derecho internacional tiene consecuencias devastadoras. Señaló que “el silencio y la pasividad internacional frente al ascenso del nazismo condujeron a una tragedia humana sin precedente: el Holocausto y una guerra mundial”.
Hoy la lógica es la misma, enfatizó, “si se tolera el uso unilateral de la fuerza, la ejecución de civiles, la piratería y el saqueo de recursos de estados soberanos, el mundo se encamina hacia un escenario de confrontación global de proporciones imprevisibles”.
Asimismo, el canciller Yván Gil informó que durante una llamada telefónica su homólogo ruso Serguei Lavrov, afirmó que el Kremlin brindará cooperación y apoyo a Venezuela en contra del bloqueo impuesto por el gobierno de Estados Unidos al país caribeño. También indicó que en la conversación repasaron las agresiones y violaciones flagrantes al derecho internacional que se han cometido en el Caribe: ataques contra embarcaciones y ejecuciones extrajudiciales y los actos ilícitos de piratería perpetrados por el gobierno de Estados Unidos.
Lavrov expresó la solidaridad de Rusia con el pueblo de Venezuela y con el presidente Maduro; ratificó su pleno respaldo frente a las hostilidades provenientes de Washington, al señalar que “este tipo de agresiones no pueden ser toleradas”. Rusia respalda las acciones emprendidas por Venezuela en el seno del Consejo de Seguridad de la ONU, como la semana pasada ya lo manifestó el gobierno de China.
Las agresiones y piratería de Trump
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, declaró este lunes que el líder venezolano, Nicolás Maduro, sería
«inteligente» si eligiera dejar el poder y le advirtió que si «se hace el duro» será «la última vez» que lo haga. Al ser preguntado en una rueda de prensa en su residencia privada de Mar-a-Lago (Florida) sobre si la estrategia de Estados Unidos es derrocar a Maduro, Trump respondió: «Creo que probablemente sí. No puedo asegurarlo. Eso depende de él. De lo que quiera hacer. Creo que sería inteligente si lo hiciera. Pero ya lo averiguaremos».
Al ser cuestionado sobre por qué Maduro debería tomarse en serio la amenaza de que Estados Unidos atacaría «pronto» dentro del territorio venezolano, Trump advirtió que habría consecuencias si el mandatario venezolano «se hace el duro». Trump reiteró, sin presentar pruebas, su acusación de que el Gobierno de Maduro está inundando a Estados Unidos de drogas y criminales provenientes de las cárceles venezolanas.
Trump dijo que Estados Unidos se quedará con los 1,9 millones de barriles de petróleo del buque confiscado el pasado 10 de diciembre. «Nos lo quedaremos. Puede que nos lo quedemos, lo vendamos o lo mantengamos en nuestras reservas estratégicas. Nos lo quedaremos y los buques también».
El presidente Donald Trump y sus principales asesores no podrían ser más tajantes en sus afirmaciones: Estados Unidos creó la industria petrolera de Venezuela. Venezuela robó yacimientos petrolíferos estadounidenses mediante nacionalizaciones. Ahora, Estados Unidos quiere recuperar esos activos. Una táctica para imponer ese mantra en el imaginario popular estadounidense y justificar sys agresiones y piratería.
Esas afirmaciones se han utilizado para justificar el bloqueo estadounidense de los buques petroleros sancionados que entran y salen de Venezuela. También han situado al petróleo junto con las drogas ilícitas, en el centro de la campaña de presión del gobierno de Trump contra Maduro, lo que deja en evidencia que el gobierno de Estados Unidos conspira para apoderarse del petróleo de Venezuela.
Según Trump y sus asesores, Estados Unidos creó la industria petrolera de Venezuela. Venezuela robó yacimientos petrolíferos estadounidenses mediante nacionalizaciones. Ahora, Estados Unidos quiere recuperar esos activos. Esas afirmaciones se han utilizado para justificar el bloqueo estadounidense de los buques petroleros sancionados que entran y salen de Venezuela. También han situado al petróleo, junto con las drogas ilícitas, en el centro de la campaña de presión del gobierno de Trump ´para apoderarse de una de las reservas petrolíferas más grandes del mundo.. Ya nadie duda que Estados Unidos conspira para apoderarse del petróleo de Venezuela.
Bella Ciao
El rotativo estadounidense The New Times señaló que las fuerzas de EE.UU. no lograron incautar el petrolero venezolano Bella 1 y el buque pudo huir hacia aguas libres. “El petrolero, llamado ‘Bella 1’, se dirigía a Venezuela para recoger petróleo y no transportaba carga… huyó hacia el noreste, rumbo al océano Atlántico”, tras la aproximación de las fuerzas estadounidenses a dicho buque, informaron el domingo tres funcionarios estadounidenses que hablaron bajo condición de anonimato .
Cuando las fuerzas estadounidenses se acercaron al ‘Bella 1’ a última hora del sábado, el buque no se dejó abordar y, navegando hacia el noreste, entró en el océano Atlántico. Un segundo funcionario se refirió a la situación como una “persecución activa”. De acuerdo con uno de los funcionarios, esto ocurrió días después de que el presidente Donald Trump, anunciara que tomaría medidas enérgicas contra los buques sancionados que participan en el comercio petrolero del país bolivariano. El petrolero ‘Bella 1’ ha estado bajo sanciones estadounidenses desde el año pasado por transportar petróleo iraní.
Un día antes de la persecución al Bella 1, la Guardia Costera de Estados Unidos confiscó el Centuries, otro petrolero panameño. La secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, comunicó la incautación mediante un video en redes sociales, mientras que la portavoz adjunta de la administración, Anna Kelly, precisó que transportaba petróleo de la estatal venezolana PDVSA. Según la Casa Blanca, el Centuries operaba como parte de la denominada flota en la sombra venezolana.
La reacción de Caracas fue de rechazo, calificando la incautación como un “robo y secuestro”, mientras informes independientes recalcaron que el Centuries no está formalmente en la lista de buques sancionados del Tesoro, lo que planteó interrogantes sobre la base legal de la operación.Desde principios de diciembre, Washington ha incautado tres buques venezolanos, mientras transportaban petróleo venezolano a otros destinos.
Ante esta coyuntura, las autoridades venezolanas calificaron de “piratería” esta nueva confiscación, afirmando que incumple varias normas del Derecho Internacional y constituye una “flagrante comisión” de un “delito”.
Venezuela ha reafirmado que estos actos no quedarán impunes y ejercerá todas las acciones correspondientes, incluyendo denuncias ante el Consejo de Seguridad de la ONU, otros organismos multilaterales y gobiernos de todo el mundo.
*Sociólogo y analista internacional, Codirector del Observatorio en Comunicación y Democracia y analista senior del Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico (CLAE, www.estrategia.la)