Grave crisis energética en Ecuador: 14 apagones al día

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Eloy Osvaldo Proaño

Angustia generalizada y grandes pérdidas económicas provocan entre los habitantes de Ecuador los largos cortes de luz por la peor sequía en 60 años, ampliados a 14 horas al día, la medida más dura en lo que va del año. Para la oposición, el objetivo del presidente derechista Daniel Noboa es subir el costo de la luz y privatizar la provisión de la energía.

La temporada seca también ha desencadenado una afectación en el suministro de agua potable y problemas en la producción agrícola y las telecomunicaciones, así como 4.120 incendios forestales que dejan dos fallecidos y 44 heridos. El desconsuelo invade a los familiares de enfermos que dependen de equipos para sobrevivir o que deben mantener medicación en frío. Muchos deben envolver en bolsas de hielo la insulina, pero el hielo no aguanta ni las siete horas.

Mónica Valiente espera que lleguen clientes en su panadería, iluminada con una vela, durante un apagón eléctrico por racionamiento en Quito, Ecuador, el martes 15 de octubre de 2024. (AP Foto/Dolores Ochoa)
Panadería iluminada con una vela

Ecuador, con 17 millones de habitantes, necesita unos 4.600 megavatios y afronta un déficit de al menos 1.600 megavatios. La población se queja por la falta de soluciones: la gran mayoría no tiene recursos para adquirir un generador. Los apagones acentuatron la crisis de seguridad por la violencia de bandas narcotraficantes con nexos con carteles internacionales.

Entre enero y octubre de este año, la tasa de crímenes es de 31 por cada 100.000 habitantes y los decomisos de droga ya treparon al nuevo techo de 232 toneladas, frente a 219 toneladas de 2023. En 2023, Ecuador registró la tasa récord de homicidios de 47, según cifras oficiales.

Catorce horas al día

“Hemos tomado la dolorosa pero responsable decisión de modificar el plan de racionamientos, aumentando de 8 a 14 horas diarias” los cortes, expresó la ministra encargada de Energía y Minas, Inés Manzano, en un video divulgado por redes sociales. El anunció llegó apenas una semana después de que Noboa prometiera que los racionamientos se reducirían a cuatro horas en la primera semana de noviembre.

Ante la crisis hídrica y sus efectos, 20 de las 24 provincias ecuatorianas están en alerta roja. Una semana atrás, Noboa indicó que su administración prevé incorporar a “mediano plazo” cerca de 1.600 MW al sistema nacional de energía, desde noviembre hasta el primer trimestre de 2025, mediante la generación térmica y la operación de otra hidroeléctrica.

La crisis de generación eléctrica del Ecuador se agudizó con el estiaje, ya que el 72% de la matriz energética de Ecuador se basa en fuentes de agua. A esto se suma que Colombia dejó de vender electricidad al país. El presidente colombiano, Gustavo Petro, pidió a los países de la región que apoyen a los ecuatorianos:

La sequía ha provocado que la cota de Mazar sea mínimo y se deba apagar la central. (REUTERS/Karen Toro)
La sequía ha provocado que la cota de Mazar sea mínimo y se deba apagar la central

“La sequía en Ecuador es inclemente… Es hora que todos los pueblos hermanos de Latinoamérica nos solidaricemos. La posibilidad de desarrollar energía solar y eólica en esos países, requiere de nuestra colaboración”, escribió el mandatario en X.

Los caudales deprimidos en límites históricos impiden el buen funcionamiento de las hidroeléctricas más importantes del país, la de Mazar (sur andino) y la de Coca Codo Sinclair (en la Amazonia), son, para la autoridades, los principales focos del problema.

La decisión, indicó la ministra, busca recuperar la central de Mazar, cuya cota está en el nivel mínimo y tuvo que salir de operaciones: “Queremos hacer que se recupere ese caudal”. La represa, ubicada en la provincia de Cañar, forma parte del sistema de generación eléctrica Paute Integral, que es una de las principales fuentes de energía hidroeléctrica del país.

La represa de Mazar es un embalse que regula el caudal del río Paute, ayudando a almacenar agua durante la temporada de lluvias y liberarla en épocas de sequía, garantizando así un flujo de agua más estable hacia la central hidroeléctrica Paute, aguas abajo. Es, por tanto, una de las más importantes del país.

La crisis eléctrica es responsabilidad de los gobiernos y sobre todo del actual, que ha demostrado incapacidad, pese a que han pasado por el Ministerio de Energía cuatro personajes que agudizaron la crisis.Conaie Ecuador - ¡Basta de apagones y las mentiras de Noboa! 🕯️  #DanielNoboa ha sumido al país en la oscuridad y la indignación del pueblo  no deja de crecer. No podemos quedarnos

La sequía redujo este año a mínimos históricos el nivel de los embalses de las centrales hidroeléctricas, que generan el 70% de la demanda nacional de energía, lo que llevó a Ecuador a imponer cortes de luz de hasta 13 horas al día, como en abril. “Enfrentamos una crisis dinámica y sin precedentes que nos obliga a adaptarnos a escenarios cambiantes”, manifestó Manzano, que atribuyó la crisis a la “difícil situación climática”.

En Quito, la desesperación se apoderó de los comerciantes, que no tienen recursos para comprar un generador propio. El gremio de industriales estima que por cada hora de apagón, el país pierde 12 millones de dólares.”Esto es peor que en la pandemia (de covid-19). Ahora no se vende nada, no se saca fotocopias, no hay internet”, dijo a la televisión Isabel Corella, propietaria de una papelería en el barrio quiteño de Nayón.

*Analista e investigador ecuatoriano, asociado al Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico (CLAE, www.estrategia.la)

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