Panorama Económico Latinoamericano – Del 13 al 20 de agosto de 2024
Expansión petrolera en la Amazonia amenaza a pueblos indígenas
Los planes de expansión petrolera en la Amazonia amenazan el clima y la biodiversidad en territorios habitados por pueblos indígenas en aislamiento voluntario o de contacto inicial, de acuerdo con mapas divulgados este jueves 8 por organizaciones defensoras del ambiente y de los pueblos originarios.
“En todas partes de la Amazonia, incluso cuando la selva se acerca a un punto de inflexión ecológico, se está matando a pueblos indígenas por interponerse en el camino de las industrias extractivas”, advirtió Fany Kuiru Castro, coordinadora general de la organización regional Coica.
Esa Coordinadora de Organizaciones Indígenas de la Cuenca Amazónica (Coica), junto al Grupo de Trabajo Internacional para la Protección de Pueblos Indígenas en Aislamiento y Contacto Inicial, impulsó el mapa e informe sobre la amenazante expansión petrolera, centrado esta vez en Perú.
El reporte destaca que más de 13 000 lugares poblados de la Amazonia (23 %) se encuentran ahora en bloques de producción o exploración de petróleo y gas.
Más de 500 nacionalidades indígenas distintas tienen su hogar en la cuenca del
Amazonas y más de 31 millones de hectáreas de territorios indígenas se encuentran en bloques designados para la producción o exploración de hidrocarburos.
Los mapas y análisis desarrollados por la organización ambientalista Earth Insight muestran que los bloques petrolíferos y gasíferos actuales y propuestos se superponen con 20 %, o 1,6 millones de hectáreas de reservas de pueblos indígenas aislados en Perú, el país con mayor concentración de estos pueblos en la Amazonia.
“En todas partes de la Amazonia, incluso cuando la selva se acerca a un punto de inflexión ecológico, se está matando a pueblos indígenas por interponerse en el camino de las industrias extractivas”: Fany Kuiru Castro.
Earth Insight, basada en Estados Unidos, detectó que en los últimos 10 años se han producido más de 450 derrames de petróleo en la Amazonia peruana. Se calcula que 32 zonas contienen suficiente material contaminado para llenar 231 estadios.
El año pasado, recordó el reporte, una propuesta legislativa intentaba colocar 31 bloques petrolíferos en superposición a 435 comunidades indígenas, comprometiendo la protección de decenas de esas comunidades que viven en aislamiento voluntario.
El informe calza con la conmemoración, este 9 de agosto, del Día Internacional de los Pueblos Indígenas, dedicado este año a la protección de los derechos de los pueblos indígenas en aislamiento voluntario y contacto inicial.
Además de identificar las amenazas, el documento pide que se apoye la protección de las reservas ya creadas, el reconocimiento y la protección de los corredores territoriales transfronterizos, y que todas las partes respeten los convenios internacionales sobre el principio de “no contacto”.
Recordó que las Naciones Unidas reconocen que los pueblos indígenas “tienen derecho a las tierras, territorios y recursos que tradicionalmente han poseído, ocupado o de otra forma utilizado o adquirido”.
Asimismo, que “los Estados reconocerán y protegerán jurídicamente esas tierras, territorios y recursos, y respetarán debidamente las costumbres, tradiciones y sistemas de tenencia de la tierra de los pueblos indígenas de que se trate”.
También el ordenamiento jurídico peruano protege actualmente los derechos y territorios de esos pueblos en aislamiento o de contacto inicial con “reservas territoriales indígenas intangibles” para garantizar sus derechos fundamentales a la vida y a la dignidad.
El año pasado la crítica detuvo en Perú el proyecto de ley que habría permitido a los gobiernos regionales “anular” el reconocimiento de la existencia de los pueblos indígenas aislados, pero se mantienen los riesgos por la expansión en la exploración de petróleo y gas, y otras actividades extractivas, como la minería y la tala.
Los riesgos “son graves y amenazan toda una forma de vida, que tiene mucho que enseñar al mundo sobre cómo vivir en armonía con la naturaleza, en un momento en que más necesitamos esa sabiduría”, dijo Kuiru Castro.
Por otra parte, el informe indica que 80 % de la biodiversidad que queda en el mundo se encuentra en territorios indígenas, y, en Perú, los territorios de los pueblos en aislamiento comprenden algunas de las partes más intactas de la Amazonia, las que actúan como reservas de diversidad biológica.
Así ayudan a regenerar partes de la selva “que ya se tambalean al borde de un punto de inflexión ecológico”, con riesgo de pasar de la selva tropical a la sabana, debido al cambio climático impulsado por los combustibles fósiles y otras presiones humanas.
México, principal proveedor de servicios de Estados Unidos
Braulio Carbajal
En el primer semestre de 2024 México se consolidó como el primer socio comercial y principal proveedor de servicios de Estados Unidos, informó ayer la Oficina del Censo del Departamento de Comercio de EU.
Según los datos del organismo, en la primera mitad del año el comercio bilateral entre ambos países ascendió a 415 mil 400 millones de dólares, equivalente a 16 por ciento de los 2 billones 594 mil millones de dólares que EU comerció con el mundo.
Por debajo quedaron Canadá, con 382 mil 500 millones de dólares, que representaron 14.7 por ciento del comercio global de EU, y China, con 269 mil 200 millones de dólares, equivalentes al 10.4 por ciento del intercambio de la principal potencia económica.
El comercio entre México y Estados Unidos, de acuerdo con cifras de la Oficina del Censo, se encuentra en niveles sin precedente para un periodo similar, además de que es 5 por ciento mayor respecto a los 396 mil millones de dólares reportados en el primer semestre del año pasado.
Desde finales de la década pasada, en la administración del presidente estadunidense Donad Trump, se comenzó a registrar un reacomodo en las importaciones y exportaciones de aquel país, sobre todo tras la disputa comercial contra China, lo que después se complementó con la guerra entre Rusia y Ucrania, y la relocalización de cadenas de valor.
Lo anterior, provocó que paulatinamente China fuera perdiendo peso en el comercio de Estados Unidos: primero dejando de ser su principal socio comercial, y luego perdiendo el puesto de principal proveedor. Dichos lugares, fueron ocupados por México.
Exportaciones
Entre enero y junio, según la Oficina del Censo, México exportó a Estados Unidos mercancías por un valor de 249 mil millones de dólares, lo que representó un incremento de 5.1 por ciento frente a los 236 mil 946 millones de dólares de igual lapso del año pasado.
Detrás quedaron Canadá, con envíos a EU por un valor de 205 mil 900 millones de dólares, y China en tercero, con exportaciones por 198 mil 400 millones de dólares.
De esta forma, México se consolidó como el principal proveedor de Estados Unidos –la mayor potencia económica del mundo–, un lugar que había sido ocupado por China durante los últimos 20 años, pero que el año pasado perdió ante el dinamismo de las exportaciones mexicanas que se ubicaron en un nivel sin precedente.
En lo que se refiere a las importaciones a México desde Estados Unidos, según datos del organismo, éstas se ubicaron en 166 mil 300 millones de dólares en los primeros seis meses de 2024, un incremento de 3.6 por ciento en comparación con los 160 mil 562 millones de dólares registrados en el mismo periodo de 2023.
Por otro lado, sólo en junio, el comercio bilateral entre Estados Unidos y México ascendió a 69 mil 900 millones de dólares, lo que representó 15.9 por ciento de los 439 mil 900 millones de dólares que ese país comercio con todo el mundo en el sexto mes del año.
De esta forma, México siguió como el principal socio comercial de EU en junio, dejando atrás a Canadá con 64 mil 300 millones de dólares (14.6 por ciento) y a China con 45 mil 400 millones de dólares (10.3 por ciento del total).
Uruguay: baja inflación y correctivos negativos
El objetivo de este artículo es hacer una puesta a punto del desempeño de algunas variables relevantes relacionadas al poder de compra de las y los trabajadores y, explorar sobre lo que se espera de los correctivos o ajustes para el salario en el marco de las rondas de negociación colectiva.
El gráfico 1 muestra la variación acumulada en 12 meses del Índice de Precios al Consumo (IPC), que se utiliza para medir la inflación, índice de salario real y nominal entre marzo de 2020 y julio de 2024. En el gráfico se observa la caída, estancamiento y recuperación del salario real, la tendencia a la baja de la inflación, medida a través del IPC y, un comportamiento relativamente estable del salario nominal.
El comportamiento de estas variables podría estar indicando que la recuperación en el salario real estaría asociada a la caída en la inflación más que al comportamiento del salario nominal, ya que estos se mantienen en el entorno del 8% en el período.
El desempeño de la inflación en los últimos 12 meses mostró una caída mayor a la esperada, lo que ha dado lugar a una situación inusual con implicaciones significativas en el marco de los acuerdos salariales. En general, los correctivos salariales intentan recuperar la pérdida de poder adquisitivo en los salarios, pero, de acuerdo con lo establecido por los lineamientos del Poder Ejecutivo esta vez implicaría realizar ajustes negativos, ya que la inflación efectiva para el período de julio de 2023 a junio de 2024 fue un 2,1% inferior a la inflación proyectada en las pautas de la última ronda de acuerdos para ese mismo período.
El correctivo negativo se da porque, la inflación esperada sobre la cual se realizó el ajuste anterior fue mayor a la inflación observada. Para el período de julio de 2023 a junio de 2024, el gobierno había proyectado una inflación del 7,2%. Sin embargo, como se mencionó anteriormente, la inflación disminuyó más rápido de lo esperado, situándose en torno al 5% en los doce meses hasta junio de este año.
Este resultado da lugar a que algunos sectores tengan un ajuste negativo. La diferencia entre la inflación proyectada y la inflación real u observada es de -2,1%. Este valor negativo implica que el ajuste previsto, debe descontar este porcentaje. Adicionalmente, se debería ajustar también por lo que se proyecta de inflación para el segundo semestre, fijado en 1,3%. La combinación de estos componentes sigue siendo negativa.
Por lo tanto, el correctivo que se incluiría, por un lado, el ajuste por inflación (la diferencia entre lo proyectado y observado) y por otro, el ajuste según lo proyectado para el segundo semestre. Si bien existen deferentes situaciones según el sector y mesa de negociación, para aquellos sectores que tuvieron una recuperación en sus niveles salariales pre pandemia, este ajuste sería negativo. Por otro, para quienes no han recuperado esos niveles salariales, y lo harían ahora, su ajuste incorporaría ese componente de recuperación sumado a los dos mencionados anteriormente (ajuste por inflación efectiva de los 12 meses y proyectada para el segundo semestre).
El problema principal se da en aquellos acuerdos donde se estableció que los correctivos se aplicarán cuando los mismos resultan positivos o negativos, a diferencia de otras mesas que no incluyeron ese componente y establecieron que los ajustes se aplicarán sólo cuando la diferencia sea positiva.
Brasil: la industria marcará la diferencia en el desempeño económico
El vicepresidente y ministro de Fomento, Industria, Comercio y Servicios, Geraldo Alckmin, destacó la importancia del sector industrial para la economía brasileña en 2024. “La industria está creciendo. Será la diferencia este año. Hay un gran esfuerzo para recuperar el sector», dijo Alckmin en la inauguración del seminario «Políticas industriales en Brasil y en el mundo», en Brasilia.
El encuentro fue programado para discutir las tendencias y buenas prácticas en la política industrial, con el objetivo de impulsar el sector en Brasil, que reunió el 12 de agosto a expertos para discutir los impactos políticos y económicos en el mercado.
El ministro destacó el aumento de la producción industrial, citando datos de la Encuesta Industrial Mensual del IBGE: «la producción industrial creció un 4,1% en junio, en comparación con mayo, y un 3,2% en comparación con el mismo mes del año anterior, superando las expectativas del mercado».
«La política industrial es empleo, ingresos, desarrollo social y económico», dijo Alckmin, quien atribuyó este crecimiento a un escenario económico favorable, marcado por la caída de la inflación, la reducción del riesgo del país y el aumento de los ingresos de la población.
Alckmin también celebró las anunciadas inversiones en el marco de la Nueva Industria Brasil, una iniciativa lanzada en enero por el presidente Lula. «La industria automotriz anunció R$ 130 mil millones; la industria alimentaria, R$ 120.000 millones; la industria siderúrgica, R$ 100.000 millones. Cuando tengas confianza, tendrás una inversión”, dijo.
Mencionó varias iniciativas gubernamentales que impulsan este escenario optimista, como la creación de la Carta de Crédito al Desarrollo (LCD), la depreciación acelerada para la renovación del parque de la fábrica, y el programa Mover, que pretende innovar y descarbonizar la flota automotriz. En cuanto a la reforma tributaria, Alckmin destacó su esencialidad para aumentar la competitividad de la industria brasileña.
En su discurso, Alckmin destacó la importancia de la industria para el desarrollo social y económico del país. Según él, la industria es esencial para añadir valor, impulsar la innovación tecnológica y mejorar los ingresos de la población. No hay desarrollo social, ni economía, ganan ingresos, va de ingresos medios e ir a ingresos más altos, salarios más altos, si no tienes industria. La industria agrega valor y está a la vanguardia de la vanguardia tecnológica, dijo Alckmin.
Destacó la Nueva Industria Brasil (NIB), una política que busca el desarrollo sostenible e innovador del sector industrial para 2033, y el programa Mover, que busca aumentar la sostenibilidad en la cadena automotriz. La Made se compone de créditos financieros que, en cinco años, alcanzarán casi 18.000 millones de reales para estimular la descarbonización y la eficiencia energética. Brasil tiene un compromiso con la descarbonización y la lucha contra el cambio climático, explicó Alckmin.
Sostenibilidad
El seminario, organizado por el Ministerio de Fomento, Industria, Comercio y Servicios (MDIC), el Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES) y la Confederación Nacional de la Industria (CNI), también abordó la importancia de la sostenibilidad.
Alckmin destacó la reciente sanción del marco legal de hidrógeno bajo en carbono por parte del presidente Lula (PT). El presidente Lula firmó la ley de hidrógeno con bajas emisiones de carbono y, junto con el presidente Biden (EE.UU.) y el primer ministro Modi (India), crearon una alianza global para los biocombustibles. Brasil, India y Estados Unidos están liderar el camino alrededor de los biocombustibles, dijo.
Otro punto crucial abordado por Alckmin fue la lucha contra la deforestación. Hizo hincapié en que la preservación de los bosques es vital para reducir las emisiones de carbono y fortalecer la industria. Con una hectárea de muerte talada y quemada, liberamos 300 toneladas de carbono a la atmósfera. Así que el compromiso total, la deforestación ilegal, cero, dijo.
Alckmin también mencionó la necesidad de defensa comercial y ajustes en los aranceles de importación para promover la competitividad y estimular la economía. Necesitamos, por un lado, tener defensa comercial y, por otro, trabajar para reducir costos y garantizar la competitividad. La política industrial es empleo, renta, desarrollo social y económico, concluyó.
Argentina: Milei ordenó privatizar cuatro represas hidroeléctricas
El gobierno ultraderechista argentino de Javier Milei le puso cartel de venta a cuatro centrales hidroeléctricas clave en la generación y distribución de energía en todo el país. A través de un decreto, puso el plazo de 180 días para la privatización – para luego subastar las acciones estatales- para esos complejos ubicados en la región del Comahue, entre Neuquén y Río Negro, y renovó de facto por distintos períodos el paquete accionario de varias centrales más cuya concesión estaban vencidas.
El Presidente busca entregar el agua y la producción de energía a grandes capitales cuando podrían ser estatizadas sin pagar un peso. Las centrales que quedaron afectadas por la decisión son: Alicurá, el Chocón, Cerros Colorados y Piedra del Águila.
El decreto 718/2024 indica que en dentro de seis meses la Secretaría de Energía “llamará a concurso público nacional e internacional, competitivo y expeditivo, con el fin de proceder a la venta del paquete accionario mayoritario o controlante” de cada una de esas sociedades.
La mayoría de las concesiones de esas plantas se otorgaron el año pasado y lo que hace la media publicada en el Boletín Oficial es ratificar los plazos de explotación, darle continuidad a las operaciones y generar las condiciones para un nuevo concurso público.
En la actualidad, los complejos hidroeléctricos están en manos de las siguientes empresas: Orazul Energy administra Cerro Colorados, ENEL Generación hace lo mismo con El Chocón-Arroyito; AES SA explota la central de Alicurá, y Central Puerto SA concesiona Piedra del Águila.
El decreto aclara que esas centrales -claves en la conversión de energía eléctrica para luego ser distribuida en la red que llega a hogares, industrias y otros sectores- fueron transferidas al sector privado y que en la actualidad se encuentran vencidos y en período de transición.
El proceso de concesión durante los últimos años estuvo a cargo de Enarsa (Energía Argentina NA) como NASA (Nucleoelétrica Argentina SA) y en esta oportunidad volverán a estarlo. La diferencia es que esta vez, esas dos compañías estatales entraron en el paquete de la Ley Bases como empresas a privatizar. Con lo cual, ya no habrá organismo del Estado especializado en el tema que vigile los criterios de la nueva privatización.
El gobierno libertario es responsable de la entrega de los bienes comunes naturales a capitales concentrados para que realicen un negocio garantizado. Las represas son enormes obras de infraestructura que fueron financiadas con fondos públicos y construidas con el trabajo de miles de obreros para producir energía de baja contaminación y bajo costo.
Con la ofensiva privatizadora de los ‘90 fueron concesionadas a un puñado de empresarios por 30 años (que en algunos casos transfirieron sus contratos). Un verdadero robo que ningún gobierno cuestionó y que está gestión terminaría de consumar al directamente ceder la propiedad de las mismas, señala Matías Hof.
En el caso de las concesiones hidrocarburíferas o mineras, el discurso extractivista sostiene que son necesarias inversiones en dólares, maquinaria y tecnología con la que no cuenta el Estado. En este caso, la mayor inversión ya está hecha, y el dominio y posesión de los equipos de la concesionaria se debería haber transferido al vencimiento de las concesiones al Estado, añade.
Perú: la paradoja del crecimiento económico: producción y desempleo
Alejandra Dinegro Martínez
Aunque Perú ha mostrado un crecimiento económico del 5,04% en mayo, el empleo sigue siendo débil. El aumento del subempleo y el alto número de desocupados indican que la expansión no ha mejorado la calidad del empleo ni la sostenibilidad laboral.
En los últimos meses, el Perú ha experimentado cifras de crecimiento económico que no se veían en los recientes últimos dos años. Según datos del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), en mayo el conjunto de operaciones económicas que intervienen en el proceso productivo del país tuvo un vigoroso despunte del 5,04% respecto al mismo mes del 2023. Sin embargo, a pesar de esta tasa de expansión, el empleo no ha gozado el mismo ritmo de crecimiento, lo que refleja no solo una inconsistencia sino también una seria preocupación del modelo productivo nacional y sus debilidades.
¿Qué sectores han ayudado a este crecimiento? Actualmente, la pesca industrial, ha sido un motor importante en esta expansión. En mayo, creció un impresionante 329,16% en comparación con el mismo mes del año anterior, cuando se contrajo en un 70,60%. Este avance se debe en gran parte a condiciones climáticas favorables que han permitido una mejor captura de anchoveta, por ejemplo. Recordemos que la agroindustria y la pesca industrial de anchoveta fueron sumamente afectadas por las condiciones climáticas anómalas observadas durante la mayor parte del 2023. Asimismo, junto a la pesca, el sector manufactura vinculada a ella (producción de harina y aceite de pescado), aportaron el 2,48% de todo el crecimiento de mayo. Sin embargo, este crecimiento es estacional y no refleja una recuperación sostenible.
Otros sectores del crecimiento son el sector agropecuario que aumentó en 2,64% explicado por los mayores volúmenes obtenidos de productos del subsector agrícola (cebada, maíz, papa principalmente). El sector construcción creció un 5,54% debido al avance en proyectos públicos, aunque el consumo interno de cemento cayó un 1,69% por la desaceleración en obras privadas. Sin embargo, el panorama laboral en el sector no ha mejorado durante estos meses, incluso ha sido uno de los más afectados y no se espera una pronta recuperación. En 1,83% creció sector Minería e Hidrocarburos y el sector comercio creció Sector Comercio creció 2,06%.
A pesar de este crecimiento económico, la situación del empleo en Lima Metropolitana muestra un panorama desalentador. Aunque el número de trabajadores adecuadamente empleados creció un 5% respecto al 2023, este avance es nulo en comparación con la prepandemia. Más preocupante aún es el aumento del subempleo, que ha crecido un 32,3% en comparación con el 2019. Esto significa que una gran parte de la población está empleada en condiciones precarias, con salarios y beneficios reducidos.
Aunque las cifras de crecimiento económico pueden parecer positivas, en realidad esconden una economía débil. El crecimiento se concentra en pocos sectores y no se refleja en una mejora significativa del empleo. Por lo tanto, no se puede inflar el pecho por un rebote mensual mientras que el conjunto de la economía tiene un escaso progreso y, por lo tanto, menos generación de empleo adecuado, menos dinero en el bolsillo de las familias, más pobreza y más hambre.
Además, el número de desocupados sigue siendo superior a los niveles prepandemia. A fines de junio, Lima registró 388.000 desocupados, un 17,7% más que en el 2019. Esta cifra es además un 6,2% mayor que hace un año, lo que indica que la recuperación económica no ha sido suficiente para absorber a toda la fuerza laboral.
En términos de ingresos, la situación también es desalentadora. En junio de 2024, los ingresos en Lima metropolitana se ubicaron en S/1.975, un 6% por debajo del mismo período en 2019. Esta disminución en los ingresos afecta directamente el poder adquisitivo de los trabajadores y su calidad de vida.
Las micro y pequeñas empresas (MYPES) han sido particularmente afectadas por esta situación. Si bien estas empresas son fundamentales para la economía peruana, representando una gran parte del empleo formal (e informal), su capacidad para sostenerse y crecer ha sido mermada por la falta de apoyo y la creciente precariedad. Las MYPES enfrentan desafíos adicionales como el acceso limitado al crédito y la falta de políticas efectivas que fomenten su desarrollo, lo que agrava la situación del empleo, contribuye a un aumento en la informalidad laboral y baja productividad.
El desempleo juvenil es otro aspecto crítico en esta crisis. Los jóvenes, que representan una parte significativa de la fuerza laboral, encuentran cada vez más difícil acceder a empleos de calidad. Esta problemática no solo impacta negativamente en el presente de los jóvenes, sino que también tiene implicaciones a largo plazo para el desarrollo económico del país, al desperdiciarse el potencial del bono demográfico.
La población vulnerable, incluyendo a las personas mayores y las mujeres se enfrentan a dificultades adicionales en este entorno económico adverso. Estas poblaciones, que ya enfrentaban barreras significativas para la inclusión laboral, ven ahora aún más restringidas sus oportunidades de empleo. La falta de políticas inclusivas y de programas de apoyo específicos para estas comunidades aumenta el riesgo de pobreza y marginación, erosionando el tejido social y acentuando las desigualdades existentes.
La economía puede estar mostrando signos de recuperación, pero si no se aborda en su conjunto, el país seguirá enfrentando grandes desafíos en términos de bienestar social y estabilidad económica. Además, se deben implementar medidas específicas para apoyar a las MYPES, combatir el desempleo juvenil y proteger a las poblaciones vulnerables para asegurar un futuro más inclusivo y próspero para todos los peruanos.
* Socióloga por la Universidad de San Marcos, articulista de Diario Uno, Otra Mirada, entre otras publicaciones.
Panorama internacional
1.-Disminuye la inversión extranjera directa en América Latina
La inversión extranjera directa en la región disminuyó en 2023, cuando ingresaron por ese concepto 184 304 millones de dólares, cifra 9,9 por ciento menor a la IED que ingresó el año precedente, informó este jueves 1 la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
En 2022 la IED había alcanzado su mayor nivel, 205 961 millones de dólares. Con el descenso del año pasado todavía se mantiene por encima del promedio de la última década, precisó el organismo de las Naciones Unidas en esta capital chilena.
El peso de las entradas de IED en el producto interno bruto (PIB) de la región también se redujo: en 2023 representó 2,8 % (3,6 % en 2022), pero la participación regional en el total mundial de flujos de IED (14 %) fue mayor al porcentaje promedio de la década de 2010 (11 %), se indicó.
La disminución de los flujos de IED recibidos por Brasil (-14 %) y México (-23 %), los dos países con mayor participación en las entradas totales, explica, en gran medida, el resultado de la región, indica el estudio “La Inversión Extranjera Directa en América Latina y el Caribe 2024”.
En América del Sur, Perú también registró una disminución bastante pronunciada de las entradas de IED (-65 %), mientras que Argentina y Chile experimentaron un aumento (57 y 19 %, respectivamente).
En América Central y en el Caribe también se recibieron más inversiones que en 2022 (incrementos de 12 y 28 %, respectivamente). En el istmo casi todos los países recibieron más IED, destacándose el crecimiento en Costa Rica (28 %) y Honduras (33 %).
En la subregión Caribe, el incremento se debe sobre todo al incremento de las entradas en Guyana (64 %) y República Dominicana (7 %).
José Manuel Salazar-Xirinachs, secretario ejecutivo de la Cepal, dijo al presentar el estudio que “la inversión extranjera directa puede ayudar a enfrentar, en particular, la primera de las tres trampas de desarrollo en las que está sumida América Latina y el Caribe: la de baja capacidad para crecer”.
“Para ello se necesitan políticas de atracción de inversiones que coloquen el énfasis no solo en atraerlas, sino también en lo que sucede luego del establecimiento, y que conecten estas políticas con las de desarrollo productivo de los países”, aseveró.
Añadió que “todo esto requiere fortalecer las capacidades técnicas, operativas, políticas y prospectivas (Topp) en la materia”.
Desde el punto de vista sectorial, 46 % de la IED en 2023 se dirigió a servicios, aunque este sector recibió menores inversiones que en 2022 (-24 %).
Las inversiones en manufacturas volvieron a crecer por segundo año consecutivo (9,0 %), con incrementos en América Central, Colombia, México y República Dominicana. Las entradas en el sector de recursos naturales también crecieron (+16 %), a pesar de la caída registrada en Brasil.
En cuanto a los componentes de la IED, la reinversión de utilidades aumentó 15 %, casi la mitad de las entradas en 2023, mientras que los aportes de capital y los préstamos entre empresas se redujeron 22 % y 36 %, respectivamente.
Estados Unidos y la Unión Europea fueron los principales inversionistas, el primero con 33 % del total y la UE con 22 % (sin Países Bajos ni Luxemburgo). China, en tanto, redujo sus inversiones en la región.
Por otra parte, la inversión de la región en el exterior (empresas translatinas) cayó 49 %, retornando a niveles normales luego del máximo alcanzado en 2022.
Salvo excepciones, la IED continúa concentrándose en sectores y países que ofrecen recursos naturales o mano de obra relativamente barata, dice la Cepal.
El objetivo de esos inversionistas es agregar más valor, en el caso de los recursos naturales, así como diversificar y escalar hacia sectores con mano de obra más calificada, e incrementar los derrames tecnológicos y encadenamientos productivos que se deriven de esta inversión, apuntó la Cepal.
El informe presenta 17 lineamientos para la formulación y el fortalecimiento de políticas de atracción de IED como factor de desarrollo productivo sostenible e inclusivo en la región.
Para ello se analizan las experiencias de las agencias de promoción de inversiones de ocho países de la región (Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Panamá, República Dominicana y Uruguay), así como las iniciativas en economías de otras regiones, como Malasia, Polonia, Sudáfrica y Turquía.
El análisis da importancia a una aproximación territorial a los esfuerzos en materia de desarrollo productivo, y a partir de estudios de caso de Argentina, Brasil, Chile, Colombia y México ofrece seis lineamientos para promover la inversión extranjera directa subnacional.
Salazar-Xirinachs dijo que urge involucrar a actores del sector público, privado, academia y sociedad civil en la construcción e implementación de estrategias de IED, para garantizar cooperación y aprovechamiento de los beneficios post establecimiento.
Cepal dice que se requiere dotar de recursos, personal calificado y estabilidad en la continuidad de esfuerzos para promover inversiones eficazmente, así como implementar un sistema riguroso de monitoreo y evaluación de las políticas, incentivos y condicionalidades.
Asimismo, es importante focalizar la atracción de la IED hacia sectores o áreas consideradas prioritarias para el desarrollo productivo sostenible de la región. La Cepal ha propuesto al menos 14 sectores impulsores en la industria, los servicios y en áreas relacionadas con el Gran Impulso para la Sostenibilidad.
Entre ellos se destacan la industria farmacéutica y de ciencias de la vida, la de dispositivos médicos, la exportación de servicios modernos habilitados por las tecnologías de la información y comunicación, la sociedad del cuidado, el gobierno digital, la transición energética, la electromovilidad y el turismo sostenible.
2.- En México, cuatro de cada 10 empleos que genera China en América Latina
Cuatro de cada 10 empleos generados por inversiones de China en América Latina entre 2020 y 2023 se ubican en México, de acuerdo con datos del Centro de Estudios México-China (Cechimex).
Según el Monitor de la Inversión de China en América Latina, de 2020 a 2023 los capitales del país asiático han generado 283 mil 343 puestos laborales en la región y México concentra la mayor parte, con 112 mil 657 plazas.
El caso de México es llamativo en cuanto a la generación de empleo vía la inversión de China, con más de 112 mil trabajos generados en 2020-2023 o 39.76 por ciento del total, señala el documento elaborado por el organismo, que forma parte de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
De acuerdo con el informe, presentado la semana pasada, el número de plazas laborales creadas por China en México es muy superior a las 27 mil 891 plazas laborales que se abrieron en el mismo lapso en Brasil, país al que el gigante asiático destina la mayor parte de sus inversiones en la región.
Entre 2020 y 2023, la inversión extranjera directa (IED, destinada a actividades productivas) de China en Brasil ascendió a 15 mil 632 millones de dólares; detrás se ubicaron Argentina, con 10 mil 411 millones; México, con 6 mil 991, y Perú, con 5 mil 242 millones de dólares.
El documento dice que Brasil sigue siendo el principal destino de la IED china, con 33.95 por ciento de los 46 mil 220 millones de dólares de 2020 a 2023, aunque con una fuerte tendencia a la baja desde el periodo 2010-2014; mientras Argentina (con 22.52 por ciento del monto total), México (15.06 por ciento), Perú (11.34 por ciento) y Chile (8.73 por ciento) han incrementado su participación.
Sectores vinculados a las materias primas (metales, minerales y minería) siguen siendo predominantes en la IED de China en América Latina, con 34.22 por ciento durante 2020-2023, aunque muy por debajo de su participación de 81.41 por ciento en el periodo 2005-2009.
En contraparte, los sectores de energía y las industrias automovilística y de autopartes se han convertido en los más dinámicos de la última década.
Se acerca a Estados Unidos
En 2017, señala el estudio del Cechimex, 20.57 por ciento de la IED mundial salió de Estados Unidos. Por detrás se ubicaban Japón, con 10.33 por ciento; China, con 9.94, y Alemania, con 5.40 por ciento; es decir, hace seis años, la inversión de Estados Unidos en el mundo duplicaba a la china.
No obstante, entre 2018 y 2022 (último dato disponible del Cechimex), la IED estadunidense en el mundo registró un promedio anual de 12.41 por ciento, mientras las de Japón y China se ubicaron en 12.28 y 11.92 por ciento, respectivamente, lo que significa que los países orientales han reducido la brecha, en el caso de China, con mayor inversión en América Latina.
Los comentarios están cerrados, pero trackbacks Y pingbacks están abiertos.