Donald Trump, ¿un rey por encima de la ley
Mirko C. Trudeau
Según la Suprema Corte de Estados Unidos, los expresidentes tienen inmunidad por delitos graves si son cometidos como actos oficiales, un fallo que representa un triunfo para el expresidente Donald Trump en su esfuerzo por evitar ser enjuiciado por delitos graves incluyendo descarrilar el proceso electoral.
Con esta decisión, el papel de Trump en el asalto al Capitolio podría quedar protegido por el Tribunal Supremo si se considera que actuó en su capacidad oficial. Sin embargo, corresponderá a los tribunales inferiores determinar si sus acciones fueron oficiales o personales. Trump celebró el fallo como “una gran victoria” que impulsa su campaña. la sentencia fue aprobada por jueces que fueron designados por él
Para jueces disidentes en ese tribunal y líderes demócratas, la decisión es una derrota para la democracia ya que establece que un mandatario es ahora un rey por encima de la ley. No todos son iguales ante la ley … y menos ante la Corte Suprema, que otorgó este lunes una inmunidad parcial a Trump por sus intentos como presidente de revertir el resultado de las elecciones de 2020, que culminaron en el asalto al Capitolio.
El caso fue devuelto a tribunales inferiores, lo que en la práctica disminuye las probabilidades de que el expresidente enfrente un juicio antes de las próximas elecciones.
El presidente Joe Biden, señaló que el fallo que otorga la inmunidad parcial a Donald Trump por su papel en el asalto al Capitolio establece «un precedente peligroso” e implica que cualquier presidente «podría sentirse autorizado a desobedecer la ley» sin afrontar repercusiones.
«Ahora, corresponde al pueblo estadounidense tomar una decisión que el Tribunal Supremo no ha tomado. Los ciudadanos deben evaluar el comportamiento de Donald Trump», afirmó Biden desde la Casa Blanca, en un intento por movilizar a los votantes de cara a las elecciones de noviembre.
Con el fallo aprobado por los seis jueces conservadores y rechazado por los tres moderados, el caso del Departamento de Justicia contra Trump será postergado casi seguramente hasta después de la elección –el objetivo del ex presidente para promover el caso– y posiblemente quedará anulado.
El fallo no otorga inmunidad total a las acciones de Trump cuando era presidente, sólo a las que se pueden calificar como actos oficiales mientras ocupaba la Casa Blanca. El fallo define que Trump y otros gobernantes gozan de inmunidad absoluta por actos cometidos bajo la autoridad constitucional del mandatario, que también gozan de supuesta inmunidad por otros actos oficiales, pero no son inmunes por actos considerados no oficiales.
Trump ha logrado postergar los juicios en su contra hasta después de las elecciones –mientras los tribunales inferiores evalúan qué es o no un acto oficial– y por lo tanto el electorado no sabrá si violó o no la ley. El republicano, su equipo y sus simpatizantes festejaron el fallo: Gran triunfo para nuestra constitución y la democracia escribió.
Temor por la democracia
La jueza Sonia Sotomayor escribió su posición minoritaria: Con temor por nuestra democracia, yo disiento y concluyó que el fallo implica que en cada uso del poder oficial, el presidente ahora es un rey por encima de la ley. Agregó que el fallo remodela a la institución de la presidencia. Se burla del principio, un fundamento para nuestra Constitución y sistema de gobierno, de que ningún hombre está por encima de la ley.
No hay que olvidar que el expresidente ya es un criminal convicto en el caso en su contra por manipular la elección y ocultar gastos electorales para silenciar a una estrella de pornografía. Pero si gana, es posible que ya no sea procesado mientras sea presidente: nombrará a un procurador general que descarte los cargos federales y/o que podrá autoindultarse en los dos casos federales, pero no en el estatal que enfrenta en el estado de Georgia.
El fallo ordena que tribunales inferiores analicen y definan ahora cuáles son actos oficiales y cuáles no. Pero se supone que varios de los actos que realizó para descarrilar los comicios de 2020 ahora serán clasificados como actos oficiales que gozan de inmunidad.
Esos actos incluyen fomentar el asalto al Capitolio el 6 de enero de 2021 y por los cuales está penalmente acusado –entre estos sus comunicaciones con oficiales del Departamento de Justicia para presionarlos a frenar la certificación de los resultados estatales, sus comunicaciones con su entonces vicepresidente Mike Pence para anular el proceso de la certificación de los resultados por el Congreso entre otros.
Este fallo podría afectar los otros tres juicios que enfrenta, ya que Trump alega que también debe de gozar de esa inmunidad en esos casos que incluyen interferencia electoral y manejo indebido de documentos secretos oficiales de seguridad nacional.
Trump logró al menos postergar los juicios en su contra hasta después de las elecciones –mientras los tribunales inferiores evalúan qué es o no un acto oficial– y por lo tanto el electorado no sabrá si violó o no la ley. Trump ya es un criminal convicto en el caso en su contra por manipular la elección y ocultar gastos electorales para silenciar a una estrella de pornografía.
Si gana las elecciones de noviembre, es posible que ya no será procesado mientras sea presidente, que nombrará a un procurador general que descarte los cargos federales y/o que podrá autoindultarse en los dos casos federales (no en el estatal que enfrenta en Georgia).
Líderes demócratas calificaron la decisión del máximo tribunal como un golpe contra la democracia estadunidense, permitiendo que un presidente goce de impunidad si usa su puesto para delitos graves, incluyendo asesinar a rivales políticos u organizar un golpe de Estado.
Biden subrayó que es un precedente peligroso porque el poder del puesto ya no será limitado por la ley y que implica que no habrá virtualmente ningún límite sobre lo que puede hacer un jefe de Estado, en ese país. Jerrold Nadler, el demócrata de mayor rango en el Comité Judicial de la cámara baja, advirtió que la decisión abre la posibilidad de establecer una dictadura.
En su editorial, The New York Times sostuvo que el principio fundamental de que nadie está por encima de la ley fue puesto a un lado, acusando que justo en la semana que se celebra la fundación de esta nación, la Suprema Corte tomó un paso hacia restaurar la monarquía que fue rechazada por la Declaración de Independencia.
Steve Bannon preso
Mientras, en un asunto relacionado con el caso contra el magnate por sus esfuerzos para subvertir la última elección presidencial, su exestratega político y populor de la ultraderecha en Europa Steve Bannon, fue obligado a entregarse a las autoridades para iniciar una condena de cuatro meses en una prisión federal en Connecticut por desafiar a órdenes para presentarse ante un comité del Congreso encargado de investigar el intento de golpe de Estado.
En un mitin que convocó a las afueras de la prisión poco antes de ingresar, donde se dieron cita ultraderechistas, una diputada federal y un ex jefe de la policía, pronosticó grandes triunfos en los comicios para los republicanos y declaró “victoria o muerte…. O ganamos y tendremos la muerte de una república constitucional”. Bannon aún enfrenta otro juicio por usar fondos que solicitó supuestamente para apoyar la construcción del famoso muro fronterizo para sus propios intereses.
*Politólogo y analista estadounidense, asociado al Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico (CLAE)
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