La guerra mediática y psicológica contra los bloqueos en Bolivia
Verónica Zapata|
El lunes 3 de agosto se inicio el paro indefinido con bloqueos en Bolivia y se desató una feroz guerra mediática, como cuando se concretó el golpe de Estado en 2019. Televisoras, diarios, radios y redes sociales funcionales al golpismo, se dedican permanentemente a deslegitimizar y desvirtuar los bloqueos y, a la vez, a demonizar a los dirigentes, candidatos del Movimiento al Socialismo (MAS) y al expresidente Evo Morales.
Desde el poder se manipula psicológicamente a un sector de la sociedad para enfrentarlos con quienes luchan por los derechos a vivir en democracia, a votar y elegir libremente a los gobernantes, a la salud, educación y trabajo. Los medios funcionan como operadores políticos, pero se presentan como “independientes” y “neutrales”.
Fabrican matrices de opinión falsas, imponen imaginarios colectivos, para deslegitimizar a quienes resisten el golpe. Las siguientes son las mentiras que sostienen los medios:
1-Los bloqueos son del M.A.S.: El paro indefinido con bloqueos es parte de la lucha del pueblo boliviano, no del MAS. Esta lucha excede y rebasa al MAS Hay apoyo de todo el pueblo boliviano en su conjunto. El dirigente Felipe Quispe, El Mallku, si bien críticó al partido de Evo, participa de los bloqueos.
2- Las organizaciones sociales rechazan la fecha electoral por capricho: Se rechaza porque la decisión fue tomada por el Tribunal Supremo Electoral (TSE) de forma unilateral, inconstitucional e ilegal mediante una resolución pasando por encima de la ley N° 1297 y N° 1304 que convoca a elecciones, avasallando la constitución política de Estado y a la Asamblea Legislativa.
La ley N° 1297 de Postergación de las Elecciones Generales refiere que las elecciones se realizaran en un plazo máximo de 127 días computables a partir del 3 de mayo, es decir hasta el 6 de septiembre, como sugirió en un principio el TSE. a ley N°1304 (modificatoria de la anterior) solo modifica el artículo 2 de la ley 1297.
Una resolución no puede pasar por encima de una ley, por lo que la elección del 18 de octubre sería un acto nulo, que a futuro la presidenta de facto Jeanine Áñez podría no reconocer. Por tal motivo, los candidatos del MAS. condicionaron un acuerdo de una nueva fecha electoral a que ésta se estableciera mediante una ley y no por una resolución, con el fin de ingresar al marco jurídico constitucional y tuviera validez legal.
Salvador Romero, presidente del TSE, tiene conocimiento de esto. ¿A qué juega? Los cables revelados por WikiLeaks demuestran su vínculo con el Departamento de Estado estadounidense y con la Agencia de EEUU para el Desarrollo Internacional (USAID), a través de la cual la Agencia Central de Inteligencia (CIA) canaliza fondos para operaciones políticas contra gobiernos y lideres no alineados a Washington.
La elección debía haberse rralizado el 22 de enero, cuando se venció el mandato de Evo Morales. Se postergó para el 3 de mayo, luego pra el 2 de Agosto, pero se acordó para el 6 de septiembre, con la excusa de que el pico de contagio coincidiría con estas fechas. Posteriormente el TSE la cambió para el 18 de octubre, ahora con la excusa de que el pico de contagios será en octubre y noviembre.
3-La gente se está muriendo por falta de oxigeno debido a los bloqueos: Antes de los bloqueos Bolivia sufría de desabastecimiento de oxigeno y la gente se moría en las calles, lo que se publicó en diversos medios internacionales. No es verdad que las cisternas con oxigeno estarían varadas en los puntos de bloqueos
Videos difundidos internacionalmente demuestran que cómo los puntos de bloqueos permiten pasar a las ambulancias, cisternas de oxigeno y lo relacionado a insumos de salud, medida que se determinó desde la Central Obrera Boliviana (COB).
Se publicaron fotos de bebés, con el falso mensaje de que estarían muriendo por falta de oxigeno. Recién el 31 de julio Áñez inició los trámites para importar oxigeno medicinal desde Uruguay y EU debido a su carencia por la alta demanda.
4-El MAS y/o los que bloquean quiere fomentar el contagio de Covid-19: Esta acusación la realiza el mismo gobierno de facto que no abasteció de equipos de salud e insumos a los hospitales durante la cuarentena. Debido a ello, en Bolivia colapsaron el sistema de salud público y privado, crematorios, cementerios, laboratorios, se compraron respiradores con sobreprecios, impidieron la entrada de médicos cubanos, prohibieron la importación de la medicina cubana Interferón alfa 2b, etc.
Bolivia ocupa el séptimo lugar del mundo con más muertes por Covid-19 por cada 100.000 habitantes con un porcentaje de 24,73%, según la Universidad John Hopkins. Tiene 298 muertos por millón de habitantes y Argentina 100, pese a que Argentina la cuadriplica en cantidad de habitantes. Actualmente los grupos paramilitares se manejan en bandas en las ciudades, golpeando a quienes bloquean carreteras. Ya se olvidaron de la pandemia.
5-Demonización de dirigentes indígenas: Se los acusa de “terroristas”, “narcotráficantes”, “sediciosos”, “violentos”, que “quieren muertos”, entre otros epítetos. Circulan audios falsos del joven dirigente cocalero Andrónico Rodríguez llamando a la violencia, así como fotos manipuladas. Lo mismo sucede con Leonardo Loza, mientars que a Orlando Gutiérrez, dirigente minero, lo llaman “minero disfrazado”.
6-En los bloqueos tienen pólvora y armas: El “periodista” español Estrambasaguas de la derecha fascista de España, sostuvo en redes que “los que bloquean tienen pólvora”. La mentira fue retuiteada por cuentas fantasmas -como sostiene el español Julián Masias Tovar, especialista en redes-, en su mayoría creadas recientemente o durante el golpe de estado del 2019 con ocho números en el nombre, geolocalizadas en otros países.
7- Los camiones son asaltados o saqueados en los bloqueos: Javier Robles, transportista de pollo viralizó un video donde relató que quedó varado en un bloqueo y que no lo saquearon, sino que vendió su pollo a los comunarios para que no se descompusiera, desmintiendo la versión oficialista.
8-Feroz campaña contra la imagen de de Evo Morales: Se viralizaron fotos del exmandatario acompañado de una mujer y videos con audios montados para reactivar las acusaciones de “tener un harén de mujeres”, “salir con jovencitas”, “ser parte de orgías” “ser machista”, “caudillo”, “patriarca”, etc.
Por otro lado, también lo acusan de llevar una vida de “jeque árabe” en Argentina (en época de aislamiento social). Publican fotos de yates, palacios, autos de lujo, mansiones, etc., adjudicándoselas al exmandatario. Estrambasaguas, difundió en sus redes sociales fotos de yates lujosos adjudicándoselas a Morales.
Estas acusaciones relacionadas con la temática de género, se inicio con el fake news del “Caso Zapata”, inventándole un hijo a Morales, lo que desencadenó en la derrota del referéndum del 2016, punta de lanza del golpe del 2019.
Carmen E. Gonzales, senadora golpista de Pando, quien en su cuenta de Twitter se jacta de luchar contra la “dictadura” de Morales, el 7 de agosto del 2020 escribió: “Me dicen que hay fotos de pedofilia del narco @evoespueblo Mándenlas por aquí. Que el mundo sepa de este socialista delincuente”.
Por otro lado, Gabina Condori Nina, una supuesta “líder indígena” acusó de “violaciones” al ex mandatario durante el golpe del 2019. Luego asumió como viceministra de Educación de Áñez.
Esta estrategia, aprovechando el auge feminista, se repite siempre con líderes, dirigentes, periodistas y presidentes populares y/o que no se alinean con la política de EU. Un caso emblemático fue el de Julián Assange acusado de violación, luego de revelar documentos de la C.I.A.
La campaña mediática contra Morales tinte racista, debido a su ascendencia indígena y lo llaman “Cacique”. En su gestión, las mujeres, especialmente indígenas, ingresaron masivamente a la política y fueron parte de la redistribución de la riqueza, por primera vez en la historia de Bolivia. El 53 % del parlamento boliviano está compuesto por mujeres, el segundo porcentaje más alto del mundo.
Esta campaña es apoyada por un sector del feminismo financiado por ONGs. relacionadas con Europa y EU. Incluso “progresistas” despistadas o del feminismo blanco se subieron a esta campaña, e incluso algunas pusieron en duda el golpe del 2019 que llamó a golpear mujeres indígenas.
*Periodista y psicóloga boliviana, colaboradora del Centrro Latinoamericano de Análisis Estratégico (CLAE, www.estrategia.la).