Laura Gil, uruguayo-colombiana, elegida secretaria general adjunta de la OEA
Camilo Rengifo Marín
Laura Gil Savastano, la diplomática colombiana de origen uruguayo elegida este lunes como secretaria general adjunta de la Organización de los Estados Americanos (OEA), es una internacionalista comprometida con las causas del feminismo , los derechos humanos y lucha contra las drogas.
La diplomática de 59 años de edad, que asumirá como número dos de la OEA en julio próximo y será la primera mujer en el cargo, nació en Uruguay pero se educó en Estados Unidos y llegó a Colombia a mediados de los 90 después de haber trabajado para las Naciones Unidas. Gil se desempeña actualmente como embajadora de Colombia en Austria, donde lideró, según ella, avances importantes en los mandatos que le encomendó el gobierno de Gustavo Petro, incluyendo una reforma al régimen global de drogas.
Gil, quien competía con la peruana Ana María Sánchez y la guatemalteca Claudia Escobar, resultó electa en una segunda ronda de votación, al obtener el respaldo de 19 Estados miembros y alcanzar así la mayoría absoluta. La diplomática ejercerá el segundo puesto más alto del organismo, solo por detrás del surinamés Albert Ramdin, quien fue elegido en marzo pasado como secretario general en sustitución del polémico uruguayo Luis Almagro y se convirtió en el primer caribeño en liderar la OEA.
Albert Ramdin y Laura Gil enfrentarán retos cruciales como los flujos migratorios en la región, las crisis en Haití y Venezuela, y el escepticismo de la Administración de Donald Trump hacia los organismos multilaterales.
Luego de su elección, la diplomática declaró que su prioridad es el «fortalecimiento de la OEA» y prometió trabajar para que la organización se vuelva «más transparente, más moderna, más influyente y más eficaz». «Empecé mi carrera en la OEA a los 25 años y me comprometo a honrar la dignidad que me han entregado: la primera mujer secretaria general adjunta de la OEA. No los decepcionaré», expresó.
Gil expuso además los lineamientos de su plan de trabajo ante el Consejo Permanente de la OEA, centrado en una reforma administrativa y técnica. “Hice una propuesta más que nada de una administración más moderna, más técnica, más efectiva dentro de la OEA, para responder a una necesidad de coordinación y de racionalización de recursos”.
Sobre los desafíos institucionales que enfrentará, Gil fue clara: “No soy ingenua, sé que lo que viene es muy difícil, pero tengo una enorme capacidad de trabajo”. Añadió que su papel será “respaldar al secretario general para que esta organización sea cada vez más relevante”, en un momento de fracturas internas y tensiones diplomáticas en la región, sobretodo porque ella reconoce que la OEA está pasando por un periodo de fractura y crisis que hay que afrontar para que esta organización sea una de las más influyentes del hemisferio.
Dijo que ejercerá su nuevo rol con total independencia institucional, aunque no dejó pasar la oportunidad para expresar su gratitud a quienes impulsaron su candidatura. “Desde ese lugar de la independencia le quiero agradecer a mi presidente, Gustavo Petro”.
También tiene experiencia periodística en medios colombianos como Blu Radio, el diario El Tiempo, Canal Capital y en el portal Línea del Medio, en donde siempre defendió la paz, los derechos de la mujer y los derechos humanos.
«Estamos en una región donde el feminismo todavía es visto como una mala palabra, y lo que le debemos decir a nuestros Estados es que reivindiquen la palabra, que le pierdan el miedo a la palabra», manifestó en octubre de 2022 en una reunión de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) en Buenos Aires.
De la academia al Gobierno
Su llegada al Gobierno se dio en ese mismo 2022 cuando el entonces presidente electo, Gustavo Petro, la nombró en el equipo que hizo la transición con la anterior administración en el área de relaciones exteriores.
En agosto de 2022, Petro la nombró viceministra de Asuntos Multilaterales del Ministerio de Relaciones Exteriores y la Cancillería destacó en esa ocasión su «amplia experiencia académica y práctica en la defensa de los derechos humanos, la solución pacífica de conflictos y la construcción y el mantenimiento de la paz».
Como vicecanciller, Gil promovió en noviembre de 2022 el diálogo nacional para la formulación de una política exterior feminista de la que dijo que «pondrá sobre la mesa la promoción de los derechos de las mujeres, las niñas, y las personas diversas».
Esa política la basó en tres líneas de actuación: la «pacifista», sintonizada con la política del gobierno nacional; la «participativa», creando espacios de diálogo en escenarios bilaterales y multilaterales, y la «incluyente e interseccional», para garantizar «la promoción, la garantía de los derechos humanos de todas las poblaciones: mujeres, jóvenes, comunidades, LGTBIQ+, los pueblos indígenas y demás».
Diplomacia internacional
Sin embargo, tan solo siete meses después, en marzo de 2023, fue relevada del cargo pues, según la Cancillería, «se desempeñaría en una misión estratégica para Colombia en el exterior», que acabó siendo la embajada en Viena., donde ha desempeñado desde agosto de 2023 el cargo de embajadora de Colombia en Austria, y embajadora no residente ante Croacia, Eslovaquia, Eslovenia y la República Checa, así como representante permanente ante las Naciones Unidas y las Organizaciones Internacionales.
Fue justamente en la capital austriaca donde en marzo pasado Gil consiguió una victoria para Colombia al lograr que en el 66 periodo de sesiones de la Comisión de Estupefacientes de las Naciones Unidas se aprobara una resolución para que expertos revisen y evalúen técnicamente las política globales antidrogas.
«Ubicar la hoja de coca en la lista de sustancias controladas de la Convención Única de 1961 constituyó un error histórico contra los pueblos autóctonos de Los Andes. La planta no es el problema; la planta es parte de nuestra historia y nuestras tradiciones», defendió en esa reunión.
Gil ganó en 2014 ganó el Premio Nacional del Círculo de Periodistas de Bogotá (CPB) por una serie de columnas sobre el fallo de la Corte Internacional de Justicia en el litigio limítrofe de Colombia con Nicaragua en el Caribe, y en 2019 obtuvo el Premio Simón Bolívar, el más prestigioso del país, en la categoría de opinión en radio por un pódcast sobre Venezuela.
Por todo eso, la Presidencia colombiana celebró la elección de Gil como secretaria general adjunta de la OEA como el reconocimiento de «una trayectoria ejemplar al servicio de la democracia, los derechos humanos y la integración regional».
*Economista y docente universitario colombiano, analista asociado al Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico (CLAE, www.estrategia.la)