La Celac repudió las medidas de Trump: Paraguay y Argentina se opusieron
Gerardo Villagrán del Corral
El encuentro de mandatarios de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) cerró con una declaración de ocho puntos que acordaron 31 de los 33 países, al cabo de una jornada en la que resonó el repudio a las medidas económicas y antimigrantes del régimen del estadounidense Donald Trump. Alineados con Estados Unidos, Argentina y Paraguay rompieron la sesión y quedaron afuera de la resolución final
La novena cumbre de la CELAC se llevó adelante en un contexto claramente particular: prácticamente todos los países sufren las consecuencias de las políticas de Estados Unidos desde que Trump asumió el pasado 20 de enero. Sean en materia económica o migratoria. Y eso se hizo sentir. Las y los presidentes presentes hicieron del primer foro de países que se llevó adelante en el mundo en medio de la guerra comercial desatada por Estados Unidos contra todo el mundo, pero contra China en particular.
Allí, además de la anfitrioona Xiomara Castro, estuvieron presentes Gustavo Petro, de Colombia, que recibió la presidencia pro-témpore; Luiz Inácio Lula Da Silva, de Brasil; Claudia Sheinbaum Pardo, de México; Luis Alberto Arce, de Bolivia; Yamandú Orsi, de Uruguay; Mark Anthony Phillips, de Guyana; Miguel Díaz-Canel, de Cuba, y Leslie Voltaire, de Haití. Y, también, los primeros ministros de ministros de Belice, Juan Antonio Briceño; de Guyana, Mark Anthony Phillips; y de San Vicente y las Granadinas, Ralph Gonsalves.
El presidente colombiano, Gustavo Petro, propuso actuar «en bloque» y «abrirse al mundo» para hacerle frente a los aranceles fijados por el presidente estadounidense, Donald Trump. Señaló que la CELAC «es el mecanismo integrador que nos queda, quiero que América Latina y el Caribe, en su propia diversidad enorme, tome la opción de juntarse en el mundo y no actuar sola».
«La Celac es el comienzo para construir un nosotros para la paz y para el conocimiento humano América Latina y el Caribe es paz, no exporta guerras, ayudamos a terminarlas, América latina y el Caribe es Vida, no exportamos la muerte, exportamos la solución al calentamiento global: las energías limpias, la alimentación, exportamos Vida «, señaló Petro

Resaltó que «hay que ayudar a Haití, la primera tierra libertaria, hay que ayudar a Cuba y Venezuela, la juventud venezolana no es el Tren de Aragua, hay que ayudar a Panamá y su soberanía, lo dice un colombiano, hay que construir la red eléctrica americana, para que las energías limpias del sur ayuden a descarbonizar la economía de EEUU.
“La migración es apenas la consecuencia de esa desigualdad geográfica del efecto de la crisis climática en el territorio. ¿Lo solucionamos poniendo cadenas? Ningún migrante puede llegar a una cárcel de esas (de máxima seguridad, como la de El Salvador), porque sería tratado como criminal y como esclavo y no lo es. Es un ser humano y América Latina no puede bajar la bandera de la dignidad humana”, sostuvo Petro –

El libertario presidente argentino Javier Milei no estuvo presente en Tegucigalpa: viajó sorpresivamente el miércoles a Paraguay para tener un encuentro bilateral con el mandatario de ese país, Santiago Peña, con el foco puesto en el Mercosur, con la idea de que el acuerdo sudamericano sirva de trampolín para imponer un Acuerdo de Libre Comercio con Estados Unidos. Milei y Peña se enfrentan en el Mercosur los ideales integradores de Brasil y Uruguay, de cara a una cumbre del bloque sudamericano que todavía no tiene fecha.
En el Mercosur se necesita para cerrar acuerdos que haya consenso unánime entre todos los Estados miembro (Argentina, Brasil, Paraguay, Uruguay y Bolivia, porque Venezuela fue suspendido). Si uno solo se opone, se caen los acuerdos. En la región, por ahora, Trump aplicó aranceles a todos por igual: 10%. Tanto para el «amigo» Milei como al «comunista» Lula da Silva.
» Con el presidente Peña estamos construyendo una relación bilateral que acerque a nuestros países y que, eventualmente, se traslade al resto de la región. De esta manera, un continente que durante demasiado tiempo ha sufrido en tantos lugares los embates del populismo pueda de una vez por todas salir adelante. No tengo dudas que tanto Argentina como Paraguay serán un ejemplo para toda Sudamérica», dijo Milei. Paraguay y Argentina fueron los únicos dos países que no firmaron la resolución de la Celac.

“Hoy, más que nunca, es un buen momento para reconocer que América Latina y el Caribe requieren de unidad y solidaridad de sus gobiernos y de sus pueblos, a fin de fortalecer una mayor integración regional, siempre en el marco del respeto mutuo y la observancia de la soberanía e independencia de nuestros países”, dijo la presidenta
mexicana Claudia Sheinbaum . La mandataria llevó a la Celac una visión, la de la prosperidad compartida, que cobra vida en el lema “Por el bien de todos, primero los pobres”.
La mandataria ratificó el rechazo categórico a “las sanciones y bloqueos comerciales, que sólo dañan el bienestar de los pueblos y no construyen regiones de paz y prosperidad”, como los que Washington mantiene contra Cuba y Venezuela; condena al “racismo, el clasismo, la violación a los derechos humanos y la criminalización” de los migrantes, con el combate a las causas estructurales de la desigualdad, desempleo y violencia como mejor estrategia para reducir los flujos internacionales de personas, e impulso del multilateralismo, a fin de avanzar en comercio, educación, ciencia, desarrollo tecnológico, energías limpias y conservación de la biodiversidad .
Honduras en su presidencia pro-témpore: reactivó el diálogo con India, buscó la cooperación estructurada con países del Consejo del Golfo Pérsico y con Turquíay creó puentes con la Unión Africana en búsqueda de una agenda común. Para este año, además, está prevista la realización de la cumbre birregional con la Unión Europea y la conmemoración de los diez años de relación CELAC-China en los términos de una asociación estratégica en materia de infraestructura, cambio climático e integración.
Declaración final
La declaración final acabó por ser aprobada por “consenso suficiente” y dejó afuera las posiciones de Paraguay y Argentina. El documento de ocho puntos esgrime acuerdos básicos sobre la unidad y la integración de la región que hace 15 años se trabajan desde el organismo, pero, además, se hace eco de los discursos que resonaron fuertemente durante la jornada en contra las medidas emprendidas por el gobierno de Estados Unidos.
La declaración de ocho puntos hace énfasis en el origen de la conformación del organismo en su origen, así como en el crecimiento de su propia institucionalidad. Entre ellos, en el compromiso del fortalecimiento de la CELAC como mecanismo de concertación política, en la vigencia de la Proclama de la región como “zona de paz”, la importancia de concertar intervenciones conjuntas en foros multilaterales en temas de interés común y en la profundización de los lazos de cooperación entre los países que conforman la CELAC como con otros países y grupos regionales. T
También reafirma el respaldo a la estabilidad de Haití, país que desde hace más de una década arrastra una situación de catástrofe constante, acompañada por la inestabilidad política y la violencia narcocriminal.
Lula ya había planteado la idea de que la autonomía de América Latina y el Caribe “nuevamente está amenazada”, que es necesario dejar las diferencias de lado e, incluso, propuso un programa de acción basado en tres ejes: defensa de la democracia, cambio climático e integración económica y comercial. “No podemos permitir que la pelea entre Estados Unidos y China nos cause problemas, no queremos una segunda Guerra Fría, queremos libre comercio, multilateralismo”, dijo. Alentó a sus colegas a “tomar decisiones” y criticó a Trump por “negar todo lo que fue dicho en los últimos 50 años” respecto al libre comercio y al multilateralismo.
El primero en abrir el micrófono había sido el presidente del Consejo Presidencial de Transición de Haití, Leslie Voltaire, que pidió ante la comunidad de Estados una“solidaridad activa” y el acompañamiento ante Franciapara el reclamo de reparación por los “daños del pasado y la restitución del pago”, así como en el pedido de transformar la misión de apoyo en seguridad en una misión de las Naciones Unidas, que el organismo hasta ahora evitó y que dentro del país también cosecha algunas resistencias.

“No tenemos más tiempo para continuar debatiendo, es importante que en una reunión de esta envergadura se tomen decisiones y que podamos ponerlas en práctica, porque la política está muy deslegitimada, las personas no creen más. La CELAC es lo más importante que creamos en 500 años en América Latina, no hay salida individual para ningún país, nosotros comprendemos eso y estamos acá para tomar decisiones, sino nadie nos va a creer porque no decidimos nada”, señaló Lula.
Su par hondureña, Xiomara Castro, y encargada de llevar adelante el encuentro, levantó la Declaración de Tegucigalpa en sus manos y dijo “hay consenso”, pese a las protestas de las delegaciones de Argentina y Paraguay. El canciller hondureño, Enrique Reina, explicó que la adopción de la declaración se dio con 31 apoyos de 33 -es decir, que incluso firmó El Salvador, cuyo presidente Nayib Bukele es el único latinoamericano que se reunió con Trump en la Casa Blanca-, lo que se considera como un “consenso suficiente” sobre un documento que cuenta con principios básicos que “todas las naciones han respaldado en los ocho foros anteriores de la CELAC”.