Panorama Económico Latinoamericano – del 19 al 26 de febrero de 2025

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El mercado laboral tiene cuatro barreras en América Latina

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La informalidad laboral, las desigualdades de género y entre las zonas urbanas y rurales, y las dificultades que enfrentan los jóvenes para acceder a un empleo formal, persisten como barreras cruciales para un mercado del trabajo más equitativo en América Latina y el Caribe, expuso un nuevo informe de la OIT.

El documento, “Panorama Laboral 2024 de América Latina y el Caribe”, de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), indica que cinco años después del arribo de la pandemia covid-19 la región ha logrado una relativa estabilidad en los principales indicadores laborales.

Ana Virginia Moreira Gomes, directora regional de la OIT, dijo que América Latina y el Caribe “ha recuperado los niveles de empleo previos a la pandemia, pero el panorama sigue siendo preocupante: estamos en el mismo punto que hace 10 años”.

“El crecimiento económico se desacelera y persisten las deficiencias estructurales en la generación de empleo”, apuntó Moreira Gomes.

La tasa de ocupación en la región (la proporción de personas que están ocupadas en relación con la población en edad de trabajar) aumentó 0,5 puntos y alcanzó 58,9 %, mientras que la tasa de desempleo (el porcentaje de la población que está desempleada y se encuentra activamente buscando trabajo) bajó de 6,5 a 6,1 %.

A pesar de estas mejoras a corto plazo, los niveles de participación en la fuerza de trabajo y de ocupación siguen siendo inferiores a los registrados en 2012, lo que refleja una insuficiente creación de empleo en los últimos años.

La informalidad laboral sigue siendo una característica predominante del mercado de trabajo en la región, con una tasa de 47,6 % en 2024, apenas ligeramente menor que en 2023 (48 %).

Salvo en Argentina, Brasil y México, en el resto de países las ocupaciones de tipo informal han dado cuenta de entre 48 % y 70 % del aumento neto de trabajo en el último año, lo cual refleja una falta de progreso hacia la formalización laboral.

Eso representa un reto para la calidad del empleo y la inclusión social, ya que implica que casi la mitad de los trabajadores de la región tienen contratos precarios, ingresos inestables, falta de seguridad social y mayor vulnerabilidad económica, lo cual recae de manera desproporcionada sobre mujeres y jóvenes.

En 2024, la tasa de participación femenina se mantuvo en 52,1 %, muy por debajo de la de los hombres (74,3 %), lo que implica que menos mujeres trabajan o buscan trabajo; esta brecha laboral entre géneros continúa siendo una preocupación central.

Además, las mujeres ganan en promedio 20 % menos que los hombres, y siguen siendo expuestas a mayores tasas de desocupación y empleos de menor calidad.

Gerson Martínez, especialista en economía laboral de la Oficina Regional de la OIT, dijo que “las disparidades de género en el empleo siguen siendo un obstáculo fundamental para alcanzar una verdadera igualdad laboral en la región”.

“A pesar de algunos avances, la brecha salarial de género y la segregación ocupacional basada en género continúan limitando las oportunidades para las mujeres”, puntualizó Martínez.

El empleo juvenil se presenta como uno de los mayores retos. A pesar de una leve disminución en la tasa de desocupación juvenil, de 14,5 % en 2023 a 13,8 % en 2024, todavía casi triplica a la de los adultos.

Además, las oportunidades para las personas jóvenes entre los 15 y los 24 años continúan limitadas, sobre todo en un contexto de alta informalidad e insuficiente creación de empleos. La falta de un trabajo estable y remunerado sigue siendo una de las mayores preocupaciones para el futuro de la región.

Martínez destacó la necesidad de que los países de que se desarrollen “políticas que integren de manera efectiva a las personas jóvenes en el mercado de trabajo formal”, con énfasis en crear “más oportunidades de empleo formal que brinden estabilidad y fomenten un desarrollo profesional sostenido”.

Eso implica “promover la educación técnica y profesional, así como desarrollar sistemas nacionales de cuidado que faciliten el acceso de las mujeres, especialmente de las mujeres jóvenes, al mercado laboral”, añadió el experto.

Por otra parte, las brechas en la tasa de participación económica entre las áreas urbanas y rurales continúan siendo significativas, con una diferencia de 3,2 % en favor de las zonas urbanas, y el informe destaca además la disparidad en los mercados de trabajo entre unas y otras de esas zonas.

En 2024, la tasa de ocupación en las áreas urbanas se situó en 59,1%, superando los niveles prepandemia de 2019 (58 %). En las rurales la recuperación sigue siendo insuficiente con una tasa de 52,3 % en 2024, en comparación con 53,1 % en 2019.

Moreira Gomes dijo finalmente que “para avanzar hacia la justicia social en América Latina y el Caribe es fundamental promover políticas basadas en el diálogo social, que consoliden los progresos alcanzados e impulsen un crecimiento más robusto del empleo, poniendo especial énfasis en la formalización laboral”.

Brasil acepta invitación para ingresar a la OPEP+

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«Brasil fue invitado a que formáramos parte de la carta de cooperación. Lo que hicimos hoy fue discutir exactamente la entrada de Brasil en tres organismos internacionales. Autorizamos iniciar el proceso de adhesión a la EIA, eso está aprobado”, así lo reveló el ministro de Minas y Energía del país brasilero, Alexandre Silveira.

Después de la reunión del Consejo Nacional de Política Energética, Silveira precisó que “es solo una carta y un foro de discusión de estrategias de los países productores de petróleo. No debemos avergonzarnos de ser productores de petróleo», apuntó. Interrogado sobre la preocupación que emergió entre ambientalistas por la decisión del Gobierno de ingresar en la OPEP+, el ministro respondió que se considera uno de ellos y «tienen todo mi respeto».

En las últimas dos décadas, sobre todo tras el descubrimiento de gigantescos yacimientos en aguas profundas del océano Atlántico, Brasil se ha consolidado como uno de los grandes productores del mundo y ha participado en los últimos años como «invitado» en el foro OPEP+, que le convidó a sumarse formalmente al grupo a mediados de 2023.

Al respecto, la representante de Greenpeace Brasil, Camila Jardim, consideró que con esta adhesión el país envía «la señal equivocada al resto del mundo», sobre todo en el año en que acogerá en noviembre la Conferencia de Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP30), en Belém, capital del norteño estado de Pará.

«En medio de otra ola brutal de calor y sucesivos récords en las subidas de temperatura del último año, Brasil va en contra al buscar integrar un grupo que funciona como un cartel del petróleo, trabajando para sostener precios», refirió. Según Jardim, este mal paso «pone en riesgo el papel de liderazgo climático de Brasil y, en el mundo actual, ese es un liderazgo que necesitamos mucho».

Por su parte, el especialista en transición energética de Greenpeace Brasil, Pablo Nava, sostiene que el mundo necesita «nuevas estrategias» y no volver los ojos a «viejos esquemas» de explotación petrolera. Alegó que el gigante sudamericano «no necesita ingresar a la OPEP+ para tener éxito en su política internacional».

En lugar de eso, agregó, «podría profundizar sus relaciones con algunos de estos países en otros foros multilaterales para ampliar los diferentes caminos y modelos de transición energética y economía de bajo carbono, alineados con los compromisos del Acuerdo de París».

Fundada en 1960, la OPEP reúne actualmente a 13 grandes países oferentes de petróleo en el mundo, como Arabia Saudita, Irán, Irak, Emiratos Árabes Unidos y Venezuela. Con el símbolo de suma, la sigla OPEP+ incluye también las llamadas naciones aliadas que no integran la organización propiamente, pero actúan de forma conjunta en algunas políticas internacionales vinculadas al comercio de petróleo y en la mediación entre miembros y no integrantes.

 

México: la cerveza y el tequila encabezan ventas del agro al extranjero

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Braulio Carbajal 

México terminó 2024 con marcas históricas tanto en exportaciones como en importaciones de productos agroalimentarios, revelan datos oficiales recopilados por el Grupo Consultor de Mercados Agrícolas (GCMA).

El valor de las importaciones se vio impulsado por un fuerte aumento en el sector de los granos, principalmente del maíz; en el caso de las exportaciones la demanda de cerveza y tequila continúan aumentando, principalmente en Estados Unidos.

Según el seguimiento del organismo privado, en 2024 las importaciones agroalimentarias de México ascendieron a 45 mil 284 millones de dólares, 5.8 por ciento más frente a los 42 mil 799 millones de dólares de 2023.

En tanto, el valor de las exportaciones agroalimentarias fue de 53 mil 949 millones de dólares, 5.2 por ciento más que los 51 mil 278 millones de dólares reportados en igual periodo del año previo.

Cerveza, tequila y aguacate

De esta forma, la balanza comercial de México se mantuvo superavitaria con 8 mil 665 millones de dólares, es decir, en 2024 nuestro país vendió más productos alimentarios al mundo de los que necesitó comprar para satisfacer la demanda de la población.

La cerveza se colocó como el primer producto vendido al exterior con 6 mil 722 millones de dólares, 9.1 por ciento mayor a los 6 mil 163 millones de dólares reportados en 2023.

El tequila se ubicó en segundo lugar con 4 mil 280 millones de dólares, 3.3 por ciento menos frente a los 4 mil 429 millones de dólares del año previo.

En tanto, las exportaciones de aguacate se colocaron en tercer lugar, reflejando un incremento anual de 20.1 por ciento que corresponde a 3 mil 787 millones de dólares, mientras las de bovino (ganado + carne) se encuentran en cuarto lugar con 3 mil 508 millones de dólares, reflejando un crecimiento de 7.8 por ciento.

En quinto lugar se ubica el tomate con 3 mil 339 millones de dólares, con un incremento de 11.7 por ciento.

Las berries alcanzan la sexta posición con 2 mil 963 millones de dólares, exhibiendo una variación al alza de 2 por ciento. El azúcar se ubica en séptimo lugar con un valor de 2 mil 963 millones de dólares, mostrando una variación a la baja de 13.7 por ciento. En octava posición se encuentran los pimientos con mil 845 millones de dólares, un incremento de 15.9 por ciento.

Sólo en diciembre de 2024 el valor de las exportaciones agroalimentarias fue de 4 mil 581 millones de dólares, 8.4 por ciento mayor al reportado en igual periodo de 2023.

 

La economía colombiana creció 1,7 % en el 2024

Economía de Colombia muestra un ligero aceleramiento con un crecimiento en el primer trimestre de 2023

El Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane) reveló que el Producto Interno Bruto (PIB) de Colombia aumentó un 1,7 por ciento en el 2024, un dato mayor al 0,7 por ciento del mismo periodo del 2023.

El crecimiento estuvo en línea de las expectativas que tenían los analistas del mercado, que iban de 1,6 a 2,0 por ciento. Por ejemplo, el Banco Mundial, Bancolombia y Banco de Bogotá esperaban un alza de 1,7 por ciento. Entre tanto, el Banco de la República y el Ministerio de Hacienda proyectaba un 1,8 por ciento.

En el primer trimestre, la economía aumentó un leve 0,6 por ciento, en el segundo presentó un crecimiento interanual de 1,9 por ciento, en el tercero subió 2,1 por ciento frente hace un año y en el cuarto se elevó otro 2,3 por ciento.

«En términos nominales alcanzó 1.700 billones de pesos. Con esto, un punto del PIB es ahora 17 billones de pesos», resaltó el director del centro de estudios económicos Anif, José Ignacio López.

En el cuarto trimestre del 2024, la economía creció un 2,3 por ciento, un dato mayor al 0,4 por ciento del mismo periodo del año anterior. La rama que más aumentó fue el agro, con un aumento de 6,5 por ciento: 3,1 puntos de los 6,5 totales los aportó el cultivo permanente del café.

Le siguieron la rama del comercio, reparación de vehículos, transporte y alojamiento (+4,4 por ciento) y la administración pública y defensa (+4,0 por ciento).

Sin embargo, la entidad estadística reportó que en el cuarto trimestre tres ramas estuvieron en negativo. La que más cayó fue la explotación de minas y canteras, con un descenso de 5,9 por ciento. Le siguieron las actividades financieras y de seguros (-1,1por ciento) y la rama de la Información y Comunicaciones (-0,6 por ciento).

El agro sacó la cara por la economía

En el 2024 cerraron en positivo nueve ramas de la economía. Las que presentaron el mayor aumento fueron el agro y las actividades artísticas, ambas con una subida de 8,1 por ciento.Le siguió el rubro de la administración pública, defensa, educación y salud, con un crecimiento de 4,2 por ciento; y ya de lejos la construcción, las actividades inmobiliarias y el suministro de electricidad, todas con un alza de 1,9 por ciento.

Por su parte, el comercio, transporte y alojamiento creció un 1,4 por ciento en el 2024, las actividades financieras y de seguros aumentaron un 0,4 por ciento y las actividades profesionales, otro 0,1 por ciento.

En negativo, estuvieron tres ramas. Destaca la caída 5,2 por ciento de la explotación de minas y canteras, el descenso de 2,1 por ciento de las industrias manufactureras y la disminución de 0,8 por ciento de la Información y Comunicaciones.

Desde el enfoque del gasto, destaca que la formación bruta de capital presentó un crecimiento de 7,6 por ciento en el 2024, un dato mayor a la caída de 16 por ciento del 2023.Por su parte, el gasto de consumo final creció un 1,2 por ciento: el de los hogares aumentó 1,6 por ciento y el del gobierno cayó 0,5 por ciento.

 

Ecuador en la encrucijada del almacenamiento de energía

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Gabriela Castillo – IPS

En Ecuador, las energías renovables no convencionales, como la solar y la eólica, enfrentan el desafío de la intermitencia, lo que hace imprescindible la implementación de sistemas avanzados de almacenamiento para maximizar su aprovechamiento. Sin embargo, la falta de inversión, tecnología adecuada y trabas burocráticas limitan su desarrollo en un país que atraviesa una crisis energética.

Un zumbido constante invade las concurridas calles de la avenida 10 de Agosto, a la altura del barrio América, en el centro norte de Quito. Son los generadores eléctricos encendidos para mantener a flote los locales comerciales que se adaptan a la intermitencia del suministro de energía.

Personas apresuradas esquivan las pequeñas plantas apostilladas afuera de cada local. A los estridentes retumbos de los aparatos se suman otros inconvenientes: el olor a combustible quemado y el humo de los vehículos. Gases emanados por los generadores y el monóxido de carbono de los automotores propician un espacio donde respirar es casi peligroso.

Esta es solo una de las consecuencias que viven los ecuatorianos debido a la deficiente capacidad de almacenamiento de energía eléctrica.

En el país, entre otras cosas, el problema obedece a la reducción de reservas hídricas en embalses debido a fenómenos climáticos como El Niño, que afecta la generación hidroeléctrica, principal fuente del país (95 % de la producción). Además, la creciente demanda supera la capacidad de generación y distribución. Mientras tanto, los proyectos de energías alternativas avanzan lentamente.

El almacenamiento eléctrico es la capacidad de retener energía generada, especialmente de fuentes renovables como solar o eólica, para usarla en momentos de alta demanda. En Ecuador, la falta de reserva limita la estabilidad del sistema eléctrico.

El país cuenta con recursos naturales con potencial geotérmico y una ubicación estratégica para la energía solar y eólica, pero vive una encrucijada en su transición hacia el acopio de energías limpias, enfrentando retos que van desde la dependencia de la energía hidroeléctrica hasta la necesidad de inversión y tecnología, alertan expertos consultados por este artículo.

Ecuador enfrenta un severo estiaje por la falta de lluvias desde 2017. Ante este problema, el presidente Daniel Noboa dispuso restricciones en los horarios de luz.

Los racionamientos se iniciaron el 23 de septiembre de 2024. Al principio, fueron cortes de cuatro horas, pero luego se prolongaron hasta 14 horas diarias. Desde el 15 de diciembre, los racionamientos se redujeron a dos. Esto, debido a las mejoras en la generación hidroeléctrica por el incremento de las lluvias, la importación de electricidad de Colombia y la activación de plantas termoeléctricas que utilizan gas o petróleo.

No obstante, se mantiene la incertidumbre de que las suspensiones del suministro regresen, especialmente en épocas de sequía, debido a que no existe una solución radical. A eso se suman las consecuencias económicas.

Hasta el 23 de noviembre, la Cámara de Comercio de Quito estimó que el país registró una “pérdida brutal” de 7500 millones de dólares. De estos, 4000 millones corresponden al sector industrial, mientras que 3500, al sector comercial.

El régimen presentó con bombos y platillos el Plan Maestro de Electricidad (PME) 2018-2027 asegurando la ejecución de importantes obras en el sector eléctrico. Sin embargo, expertos alertan que todavía no está clara la capacidad de almacenamiento de energía.

El objetivo del PME es diversificar el sistema energético para reducir los cortes. Por ello clasifica las energías renovables en dos grupos: Convencionales, como las hidroeléctricas, que dominan la producción eléctrica del país, pero tienen impactos ambientales. Y las no convencionales (solar, eólica, geotérmica, hidrógeno verde y biomasa) enfocadas en tecnologías limpias y sostenibles. Pero la realidad dista mucho del plan.

“De momento, solo se puede depender de las lluvias”, advierte Ulrike Stieler, directora de Leiterin DEinternational de la Cámara de Industrias Ecuatoriano-Alemana. La experta reconoce que esa no es la solución. Lo ideal, dice, sería “diversificar la matriz energética mediante generación distribuida, almacenamiento de energía con hidrógeno verde y centrales hidroeléctricas de bombeo”.

El Plan del gobierno prevé la necesidad de implementar sistemas de almacenamiento avanzados para garantizar un suministro eléctrico a mediano y largo plazo.

Por ello, plantea que las necesidades de contención para un «bloque resiliente» podrían alcanzar hasta 600 megavarios hora (MWh), con una participación máxima de 4 horas en el Sistema Nacional Interconectado (SNI). Eso será posible a través de tecnologías de depósito como baterías, celdas de combustible, volantes de inercia, supercapacitores y sistemas basados en hidrógeno verde.

La intermitencia, un gran obstáculo

Uno de los mayores desafíos que enfrenta la industria renovable es la intermitencia. El suministro solar y eólico dependen de factores como la luz solar y la fuerza del viento lo que puede ser impredecible, refiere Jorge Hidalgo, experto en energía y gerente de GreenPower. Aunque existen avances regulatorios, persisten obstáculos burocráticos y de gestión que dificultan la implementación  tanto proyectos renovables como de almacenamiento.

“La falta de previsión y continuidad en las políticas públicas ha debilitado al sector energético que anteriormente presentaba a Ecuador como líder regional”, sentencia Stieler.

La experta reconoce que Ecuador tiene un inmenso potencial de energías “pero su aprovechamiento está lejos de alcanzar 25 % del total disponible”. Añade que el progreso depende de una mayor inversión, regulación adecuada y conciencia pública sobre los beneficios de estas tecnologías. “En las hidroeléctricas tal vez llegamos a 20 % del potencial, pero el resto de las energías renovables se queda por debajo de 25 %”, advierte.

Stieler reitera que Ecuador es un país donde 91 % de su energía depende de las hidroeléctricas. No obstante, este suministro necesita de un flujo permanente, pero se ve amenazado. El cambio climático y las sequías en la Amazonía, agravada por el Fenómeno del Niño y la falta de mantenimiento en el sistema eléctrico ponen al límite la situación energética del país.

Llas energías renovables son vistas como complementarias a las fuentes convencionales como las hidroeléctricas. De ahí que su implementación y almacenamiento requieren superar obstáculos de costos, infraestructura y políticas públicas.

René Ortiz, consejero Internacional de Energía e Inversiones, explica que, en “tiempos normales”, Ecuador tiene una matriz energética de consumo de 92 % de energía por hidroelectricidad. Sin embargo, la sequía extrema ha afectado gravemente la generación.

El consejero reconoce que hay otros escenarios que impiden una adecuada generación y almacenamiento. Estos son: el financiamiento insuficiente y la burocracia que obstaculizan el mantenimiento de equipos esenciales en el sistema eléctrico nacional. A eso se suma el déficit fiscal que impacta directamente en la capacidad de respuesta del sector.

Plan Maestro hasta 2032

El médico Nicolás Crespo, quien atiende en su consultorio ubicado en un edificio de las calles 10 de Agosto y Río de Janeiro, al centro norte de la ciudad, comenta que los cortes de luz son un desafío para mantener la atención.

Reconoce que depender solo de generadores no es rentable debido a los costos y el impacto ambiental. Por ello, en las ventanas de su oficina colocó paneles solares. “Los costos operativos son mínimos ya que la luz solar es gratuita”, afirma.

Sin embargo, el gobierno parece no dar prioridad a estos sistemas de energía no convencional. De esto da cuenta el Plan de Expansión de Generación 2023-2032 que incluye 37 proyectos en operación entre 2023 y 2032.

Solo el año anterior, entró en operación el proyecto hidroeléctrico Sarapullo, a cargo de las empresas Celec EP – Hidrotoapi, con una potencia de 211,9 GWh al año. Y este año, inició su funcionamiento el proyecto hidroeléctrico Alluriquín (888 GWh/año). Para 2025 están previstos los proyectos El Aromo (Solarpack), Villonaco (Cobra Zero-E Villonaco), entre otros.

Esta puesta en funcionamiento de las hidroeléctricas preocupa a los analistas. Ricardo Burgos, docente titular de la Universidad Estatal Amazónica, advierte que las hidroeléctricas son gestionadas “sin un enfoque integral que considere beneficios económicos y ambientales”.

Los sistemas hidroeléctricos pueden tener impactos variados según su diseño y ejecución. Algunos, como Coca Codo Sinclair, afectan principalmente aspectos geológicos, como la erosión regresiva, mientras que otros, como Paute, influyen en la disponibilidad de sedimentos.

Las obras mal planificadas generan más CO2, metano y liberan metales pesados en ambientes anaeróbicos, afectando ecosistemas y redes tróficas, añade Burgos.

Aún así, el PME detalla el avance en la implementación de estos programas a pesar de que no representan un impacto amigable en el medio ambiente.

Las hidroeléctricas, aunque producen energía limpia, generan impactos ambientales y sociales significativos, como emisiones de gases de efecto invernadero, alteración de ecosistemas, y desplazamiento de comunidades, alerta el estudio “Las Hidroeléctricas: efectos en los ecosistemas y en la salud ambiental”.

Sergio Suárez, analista ambiental, reconoce que en el país se están desarrollando fuentes complementarias, como la energía eólica en los parques Villonaco y Minas de Huascachaca, ubicados en Loja, con capacidades de 16,5 MW y 50 MW respectivamente, y proyectos solares como la Planta Fotovoltaica El Aromo (Manabí), que tendrá 200 MW.

Y hay otras iniciativas adicionales que incluyen la biomasa en Guayas y Manabí, la energía marina en Galápagos y la exploración de geotermia en Chachimbiro, Imbabura. No obstante, “su potenciación deja mucho que desear en comparación con la importancia que se les da a las hidroeléctricas”, asegura Suárez.

La razón para esto, según el analista es que “la infraestructura de redes eléctricas no está preparada para integrar eficientemente fuentes renovables no convencionales, ya que existe una carencia de sistemas tecnológicos para la generación, almacenamiento y distribución eficiente de energías renovables”.

Roberto Aspiazu, presidente de la Cámara de Energía del Ecuador, añade que durante la crisis que atraviesa el país, las energías renovables son vistas como complementarias a las fuentes convencionales como las hidroeléctricas. De ahí que su implementación y almacenamiento requieren superar obstáculos de costos, infraestructura y políticas públicas.

“Las energías renovables son importantes, pero en cualquier parte del mundo son complementarias a las convencionales de tipo termoeléctrico e hidroeléctrico”, explica el presidente de la Cámara.

Aspiazu considera que el tema del almacenamiento suena bien “pero primero se tiene que contar con proyectos que estén funcionando a escala”. Todo esto, tomando en cuenta que el almacenamiento de energía demanda costos adicionales.

“Si comenzamos a hablar de almacenaje, los subsidios se incrementan porque pueden generar un costo adicional”, advierte.

René Ortiz, consejero Internacional de Energía e Inversiones, también se muestra preocupado por el panorama. Explica que, en “tiempos normales”, Ecuador tiene una matriz energética de consumo de 92 % de energía por hidroelectricidad. Sin embargo, la sequía extrema ha afectado gravemente la generación.

El consejero reconoce que hay otros escenarios que impiden una adecuada generación y almacenamiento. Estos son: el financiamiento insuficiente y la burocracia que obstaculizan el mantenimiento de equipos esenciales en el sistema eléctrico nacional. A eso se suma el déficit fiscal que impacta directamente en la capacidad de respuesta del sector.

Tanto Aspiazu como Ortiz señalan como imperante la necesidad de crear mecanismos para cumplir la demanda. De ahí la importancia de crear sistemas de almacenamiento de energías renovables no convencionales, indican los expertos.

Ortiz reitera que, en medio de este panorama, el régimen de Noboa debe contemplar el impacto social y económico, especialmente en los negocios grandes y pequeños, los que sufren el impacto de la crisis.

Ese es el caso de Angelita Toapanta, comerciante de artículos de navidad. La vendedora de 45 años forma parte de la tercera generación de su familia que distribuye artículos para la época decembrina

La mujer instaló su local en los exteriores de la Feria Libre, en la avenida Diego de Vásquez, en el norte de Quito. “El negocio no despega si las luces no se pueden probar. Yo dependo de las ventas de diciembre para el resto del año y nos está yendo mal”, expresa la comerciante.

Ecuador tiene el potencial para desarrollar almacenamiento de energías limpias, pero enfrenta importantes desafíos relacionados con la inversión, diversificación de fuentes, desarrollo tecnológico y vacíos normativos.

“Estos obstáculos, compartidos a nivel regional y global, dificultan la planificación energética y la proyección de costos. Para avanzar, es crucial una colaboración entre el Estado y el sector privado, acompañada de una planificación que aborde estas deficiencias”, concluye Ana María Mogollón, coordinadora de Recuperación y Transición Energética de Transforma.

Suárez no niega que el panorama es desalentador, pero advierte que todavía hay oportunidades por aprovechar.

“La transición hacia estas fuentes permite a Ecuador avanzar en sus compromisos de reducción de emisiones y sostenibilidad ambiental. Además, la implementación de proyectos renovables podría fomentar el empleo y la inclusión económica en comunidades locales”, dice.

En el Barrio América, los generadores siguen mezclados con el bullicio del tráfico, el aire contaminado y desafíos que frenan el desarrollo energético del país. Mientras no se despeje este camino, los ecuatorianos lidiarán con el ruido y la contaminación de los generadores como una solución temporal.

La economía de Brasil creció 3,8% en 2024

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El Índice de Actividad Económica del Banco Central de Brasil (IBC-BR), considerado un anticipo del Producto Interno Bruto (PIB) oficial, mostró un crecimiento del 3,8% en 2024, superando la expansión del 2,7% registrada el año anterior, informó la autoridad monetaria.

El crecimiento anual del 3,8 % supera las últimas previsiones del Banco Central y del Gobierno para el PIB, que proyectan una subida de en torno al 3,5 %. La economía brasileña superó las expectativas en 2024 apoyada en la fortaleza del consumo interno, un factor que ha generado una aceleración de la inflación, que cerró el año en el 4,83 %, por encima de la meta del Banco Central.

A pesar del desempeño positivo anual, el IBC-BR reflejó en diciembre una caída del 0,7%, la más pronunciada desde mayo de 2023. El Banco Central destacó que, pese a una política monetaria restrictiva con alzas en la tasa de interés de referencia, la economía brasileña mantuvo su dinamismo en los últimos trimestres.

Desde el lado de la oferta, la industria y los servicios impulsaron la economía, compensando la caída del sector agropecuario. La recuperación de la manufactura y la construcción resultó clave para este desempeño.

El Ministerio de Hacienda informó la semana pasada que el consumo y el repunte en las inversiones impulsaron el crecimiento, contrarrestando el impacto negativo del sector externo.El Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE) publicará las cifras oficiales del PIB de 2024 el próximo 7 de marzo.

El último trimestre del 2024 marcó un crecimiento del 4,4 %, según los datos del índice de actividad económica (IBC-Br), divulgado por el Banco Central, que es considerado una previa al producto interno bruto (PIB), que el Gobierno dará a conocer el próximo 7 de marzo. En diciembre, el índice cayó un 0,7 % en comparación con el mes de noviembre de 2024 y registró un aumento del 2,4 % con respecto al último mes del 2023.

El IBC-Br es una de las herramientas utilizadas por el Banco Central brasileño para definir la tasa básica de interés del país, hoy en 13,25 % tras cuatro subidas consecutivas.

El mercado financiero proyecta un frenazo para este 2025 y calcula que Brasil crecerá en torno al 2 %, si bien en los dos años anteriores terminó corrigiendo al alza sus previsiones de inicios de año ante el sorprendente rendimiento de la mayor economía latinoamericana.

Panorama Internacional

China controla el 80% de la producción de tierras raras

Inteligencia artificial, blockchain o tratamientos de vanguardia tecnológica en materia de salud, ¿sabías que todo esto depende de una serie de elementos que lejos de encontrarse “en la nube”, se encuentran bajo el suelo?

¿Qué son las tierras raras y cómo invertir en ellas?

Hablamos de una serie de elementos conocidos como las tierras raras, imprescindibles para desarrollar la revolución tecnológica que estamos empezando a vivir.

Sin embargo, no todo es montar una mina, allá donde estén y listo. Todo lo contrario, existen divisos problemas tanto de viabilidad económica de los proyectos, como de cierto grado prácticas monopolísticas por parte de China, que están haciendo que su acaparamiento sea toda una tortura para muchas de las empresas que están a la vanguardia en en el desarrollo de nuestro futuro tecnológico.

Y como ya sabemos, allí donde hay demanda a la par que escasez, hay una oportunidad de inversión. Por eso, en este artículo, te traigo cuál es la situación de este conjunto de materiales, porque es interesante, y como invertir en tierras raras forma sencilla.

¿Qué son las Tierras Raras y por qué se llaman así?

Las “tierras raras” se refieren a un grupo de 17 elementos químicos que incluyen los 15 tipos de materiales lantánidos (lantano, cerio, praseodimio, neodimio, prometio, samario, europio, gadolinio, terbio, disprosio, holmio, erbio, tulio, iterbio y lutecio), así como el escandio y el itrio.

Pese a su nombre, y paradójicamente, estos elementos no son particularmente “raros” en términos de abundancia en la corteza terrestre; sin embargo, suelen encontrarse dispersos y mezclados con otros minerales, lo que dificulta su extracción y encarece su producción.

¿Qué son las Tierras Raras? | Fuente: Tierras raras

Así pues, su importancia radica en las propiedades físicas y químicas únicas que poseen, como alta conductividad magnética y electrónica, así como resistencia a la corrosión. Estas características los convierten en componentes clave para la fabricación de productos de alta tecnología, como por ejemplo:

  • Motores de vehículos eléctricos
  • Turbinas eólicas
  • Dispositivos electrónicos (teléfonos, tablets, ordenadores)
  • Sistemas de defensa y equipamiento militar
  • Pantallas de televisión de alta definición y luces LED

Y claro, por su creciente demanda en la industria tecnológica y energética

¿Y cuál es el gran problema de las tierras raras que China ha sabido leer como nadie?

Aunque las tierras raras están distribuidas por todo el mundo, extraerlas y procesarlas no es un proceso sencillo ni barato. Requiere una inversión considerable en infraestructura, tecnología y mano de obra especializada. Y en este punto, China a mediados de los años 80, fue de los primeros países en comprender el valor estratégico de estos elementos y, consecuentemente, se enfocó en desarrollar toda la cadena de producción y refinamiento.

El resultado es que, a día de hoy, China domina alrededor del 80% de la producción mundial de tierras raras, controlando así un recurso esencial para las industrias tecnológicas y energéticas de gran parte del planeta.

El 80% de la producción mundial de tierras raras se realiza en China | Fuente: Visual Capitalist
El 80% de la producción mundial de tierras raras se realiza en China | Fuente: Visual Capitalist
Esta posición privilegiada de China en el mercado global se ve reforzada por la propia economía de escala que ha desarrollado en este área. Al haber iniciado una actividad inversora temprana y constante, ha conseguido desarrollar una cadena de valor, tremendamente eficiente en la explotación y refinado de tierras raras, que hace que iniciar otros proyectos tan intensivos en Capex en otros lados del mundo, sea muy inviable desde un punto de vista económico.

Y bueno, si a todo esto le añadimos el actual contexto geopolítico cada vez más orientado a la formación de “bloques” económicos, la dependencia de las tierras raras chinas plantea un riesgo para muchos países. Por ejemplo, las fricciones comerciales —incluidos los posibles aranceles de hasta un 25% que se están discutiendo durante la presente administración Trump— podrían encarecer o restringir el acceso a estos materiales críticos, desestabilizando sectores como la electrónica, la fabricación de vehículos eléctricos y la industria militar.

EEUU manos a la obra | Y Europa… quizás no tanto

Vale, entonces si son tan esenciales para el desarrollo de la industria tecnológica y militar, de verdad no se está subvencionando su producción desde Occidente?

Bueno, pues como suele pasar, tenemos una de cal y una de arena.

Por un lado, EEUU durante muchos años dejó prácticamente su producción debido al alto coste medioambiental y la competitividad china, e incluso se llegaron a abandonar algunas minas.

Sin embargo, y tras el inicio del segundo mandato de Trump, este escenario parece haber dado un cambio drástico, cuando bajo el argumento de la “emergencia energética”, se pretende impulsar su reactivación, subvencionando el sector.

No obstante, quizás la medida estrella de todas sea la famosa idea de comprar Groenlandia  al Reino de Dinamarca. Y es que aunque pareciera una locura más de tipo made in Trump, resulta que en Groenlandia se encuentran 43 de los 50 materiales que el gobierno de EEUU considera esenciales para el desarrollo de su industria. Pero es que además, si particularmente hablamos de tierras raras, sabemos que el 2% de las reservas mundiales se encuentran allí, aunque prospecciones más recientes afirman que debajo de ese tosco hielo dichas reservas podrían ser superiores, aproximadamente entre el 15%  y el 25%.

Reservas mineras de Groenlandia | Fuente: Science Direct

 

Y bueno, mientras tanto en Europa pues un poco lo de siempre. Si que es cierto que se está buscando impulsar algunos planes, y ya se han elaborado informes de viabilidad en procesos de prospección… pero poco más. Andamos mucho más preocupados en regular su impacto medioambiental, que en aspirar a tener cierta soberanía energética.

Y de hecho, en este punto es muy paradigmático el caso de España.

¿Y qué pasa con España?

Porque… ¿Sabías que en España se encuentran algunos de los yacimientos más importantes de algunos de los elementos que conforman las tierras raras del mundo?

Y es que esa cantinela de que en España no hay recursos naturales, es completamente falsa. Lo que no hay es voluntad de explotarlos.

Es más, nuestro país cuenta con reservas significativas de minerales estratégicos: en Ourense hay importantes yacimientos de coltán; en Cáceres se encuentran depósitos de litio; y en el lecho marino de Canarias se halla la mayor reserva de telurio del mundo, que además contiene algunas tierras raras.

Pero es en Ciudad Real donde se localiza el principal yacimiento de tierras raras de España, con capacidad para satisfacer aproximadamente un tercio de la demanda actual de la Unión Europea.

Pero claro, la mayoría de todos estos proyectos que pretendían explotar dichos yacimientos, han sido paralizados por la justicia española a raíz de denuncias presentadas por diferentes colectivos.

Esto no es nada nuevo. La famosa cultura del NO tan propia de España, que bajo las mismas circunstancias paralizó prospecciones petrolíferas en la zona de Canarias en torno al año 2015.

¿Cómo invertir en tierras raras?

Pero vamos a lo importante. Si existe tanta preocupación por la escasez de dichos elementos, y al mismo tiempo, China, que controla el 80% de su producción mundial nos puede cerrar el grifo a voluntad si la guerra comercial con Trump se pone tensa, tal vez invertir en empresas o fondos dedicados a su producción, no sea una mala idea.

Pero, ¿Cómo es posible esto?

Empresas de tierras raras que cotizan en bolsa

Bueno, en realidad, solo existen tres empresas en el mundo que se dedican a su extracción y procesamiento, al menos como la actividad esencial de su negocio. La primera es China, la segunda es de EEUU, y la tercera australiana.https://www.nodal.am/wp-content/uploads/2025/02/que-son-tierras-raras-1130x580.jpg

Empresas
ISIN
Ticker
600011.SH
CNE000000T18
MP
US5533681012
LYC . AX
AU000000LYC6

 

Vaneck Rare Earth and Strategic Metals UCITS ETF A

Sin embargo, si buscas exposición a un nicho tan particular como el de las tierras raras, más que hacer stock picking con empresas, una idea mucho más interesante podría ser invertir en algún ETF que replique la marcha del sector.
Por eso te presento como alternativa mucho más interesante, el VanEck Rare Earth and Strategic Metals UCITS ETF(REMX) con ISIN IE0002PG6CA6, el único fondo cotizado UCITS que sigue el MVIS Global Rare Earth/Strategic Metals Index, un índice compuesto por las compañías más grandes y con mayor liquidez del sector de las tierras raras y metales estratégicos.

Así pues, con un TER del 0,59% anual, este ETF se posiciona como una opción relativamente competitiva en cuanto a costes, especialmente dentro de un segmento tan especializado.

Además, el ETF incluye a las empresas arriba mencionadas otorgándoles una ponderación del 17%. El resto de componentes, aunque pueden tener líneas de negocio en relación a las tierras raras, desde luego no son el core de su negocio.

Componentes del ETF VanEck Rare Earth and Strategic Metals UCITS ETF | Fuente: JustETF
Componentes del ETF VanEck Rare Earth and Strategic Metals UCITS ETF | Fuente: JustETF

 

También cabe mencionar que sigue una estrategia de réplica física, es decir, adquiere directamente todos los valores que componen el índice, y los dividendos generados por las acciones se reinvierten en el propio fondo, lo que permite a los inversores beneficiar­se del crecimiento compuesto a largo plazo.

Eso sí, debemos destacar que la rentabilidad de este ETF no ha sido la mejor posible en los últimos años, habiéndose dejado desde que salió a cotizar más de un 50%. No obstante, dada la importancia estratégica de la minería de recursos naturales -incluidas tierras raras- para todo tipo de productos de consumo diario, quizás presente una buena oportunidad en estos momentos.

Rentabilidad del ETF VanEck Rare Earth and Strategic Metals UCITS ETF | Fuente: JustETF
Rentabilidad del ETF VanEck Rare Earth and Strategic Metals UCITS ETF | Fuente: JustETF

 

¿Cómo invertir en otro metales?

 ¿Te interesa invertir en metales esenciales tanto para el crecimiento económico, como para la producción energética? Te dejo con dos artículos acerca del litio y el cobre, dos pilares clave en sectores como la movilidad, la tecnología y la logística internacional:

  • ¿Cómo invertir en litio? – Acciones y ETFs: El litio es un componente esencial en la fabricación de baterías recargables para vehículos eléctricos, dispositivos móviles y almacenamiento de energías limpias. En este artículo, conoce los las empresas líderes en la extracción y procesamiento de litio, así como los ETFs que ofrecen exposición al mismo.
  • ¿Cómo invertir en cobre? – Acciones y ETFs: Por su parte, el cobre se ha posicionado como un metal imprescindible en la construcción, la electrónica y la transición hacia fuentes de energía renovable gracias a su alta conductividad. Y e igual forma, conoce las principales compañías mineras y los fondos cotizados que permiten participar en este prometedor mercado
En definitiva, las tierras raras son uno de esos elementos esenciales para nuestro futuro tecnológico más inmediato. Se antoja difícil una revolución en materia de inteligencia artificial, o una mejora de nuestros sistemas de defensa, sin un acceso relativamente abundante a estos materiales, cuya producción ahora paradójicamente controla China, el enemigo número 1 de EEUU.

 

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Contramedidas chinas ante los chantajes de Trump

Enrique Dussel Peters*

La respuesta de la República Popular China ante los chantajes recientes de la administración Trump –según la Real Academia Española, chantaje se refiere a “una práctica manipulativa y coercitiva en la que una persona amenaza (…) a menos que esta última cumpla con sus demandas o deseos. Esta amenaza puede ser verbal, escrita o implícita”– ha sido menos conocida que los recientes acuerdos temporales de Estados Unidos con Canadá y México.

Existen aspectos comunes entre las tres órdenes ejecutivas emitidas por la Casa Blanca el primero de febrero a los tres países: en los tres casos se hace referencia a una emergencia nacional, a la imposición de aranceles desde el 4 de febrero de 2025, a la eliminación de las importaciones de los tres países de minimis (es decir, a los envíos por un valor inferior a 800 dólares) y a la amenaza adicional de que Estados Unidos tomará medidas adicionales si los países responden con aranceles. A diferencia de las órdenes ejecutivas de EU hacia Canadá y México, con referencias explícitas al crimen organizado, fentanilo y migración (sus fronteras del Norte y del Sur, respectivamente), la exigencia de EU hacia China sólo hace referencia a la imposición de aranceles de 10% para que aborde la crisis de opioides y del fentanilo, considerando que el Partido Comunista de China ejerce el control final sobre el gobierno y las empresas de China.

Para el caso de China el contexto reciente no es irrelevante. China fue hasta 2017 el primer socio comercial de Estados Unidos –con 16.34% del comercio de EU, el de México de 14.51%–, aunque cayó a 11.27% en 2023 (y fue de 15.65% para México, convirtiéndose en el primer socio comercial de EU en 2023). Desde 2018 la presidencia de Trump inició con aranceles en contra de las importaciones de China de 25% (a importaciones por más de 250 mil millones de dólares) y en 2019 aranceles de 15% a otros 120 mil millones de dólares). Como resultado, el comercio bilateral se desplomó y particularmente las importaciones de EU desde China, de 21.59% en 2017 a 13.86% en 2023 (mientras que las mexicanas aumentaron de 13.36% a 15.43%). En este mismo periodo el arancel a las importaciones chinas aumentó de 2.67% a 10.40% (y el de México fue de apenas 0.26% en 2023).

Las medidas chinas en contra de los diversos anuncios de Trump desde 2024 y de la orden ejecutiva del 1/02/2025 no se dejaron esperar. Por un lado, y desde hace años, mediante un llamado al multilateralismo y en contra de medidas unilaterales (por parte de EU u otros países) en aras de mantener el status quo del orden comercial internacional. De igual forma, China lanzó una demanda ante la Organización Mundial del Comercio –profundamente debilitada ante la confrontación entre EU y China desde 2018– en contra de las medidas estadunidenses. Ante la exigencia de EU, el gobierno chino ha propuesto incrementar la cooperación en materia de drogas y fentanilo y en contra de medidas unilaterales. Por último, y anticipando medidas arancelarias y no arancelarias, el 4/02/2025 China anunció aranceles adicionales de 15% desde el 10/02/2025 a productos de EU como el carbón y gas natural licuado y de 10% al petróleo crudo, maquinaria agrícola y automóviles de gran cilindrada. Estas medidas pudieran afectar alrededor de 30% de las importaciones chinas de EU (o alrededor de 20 mil millones de dólares) y muy lejanas a las afectaciones a todas las importaciones chinas de EU (por unos 450 mil millones de dólares). También se anunciaron restricciones a las exportaciones chinas de minerales críticos para su uso en productos de alta tecnología.

¿Cómo comprender estas medidas y contramedidas, y las diferencias con Canadá y México?

Las exigencias de EU hacia China son muy diferentes, particularmente en materia de migración y crimen organizado, y también así las respuestas de ambos para permitir una pausa hasta inicios de marzo. Es también llamativa la falta de negociación entre las dos principales potencias mundiales: EU impuso sus aranceles y China tomó contramedidas minutos después; se esperan llamadas entre ambos presidentes sólo después de los hechos consumados. Por último, si bien China tomó contramedidas arancelarias, ante la explícita amenaza estadunidense de no hacerlo para no escalar aún más el conflicto, las medidas chinas son limitadas y afectan montos muy inferiores que las de EU.

Este escenario pareciera indicar que, a diferencia del conflicto en 2018-2019, China en la actualidad no tiene interés en un mayor escalamiento en materia arancelaria: en 2024 su PIB creció 5%, particularmente ante el dinamismo de sus exportaciones, que se han diversificado en forma significativa (EU representó apenas 14.8% de las exportaciones chinas totales en 2023, muy por debajo del 19.01% en 2017). No obstante esta estrategia de cautela también plantea que China no se atendrá a las medidas unilaterales de EU. Queda claro que si EU escala las medidas arancelarias, también lo haría China. El tamaño, la dinámica y la diversificación del comercio exterior de China permiten medidas y poder de negociación diferentes respecto a Canadá y México.

China, de igual forma, propone no escalar el conflicto comercial ni una generalizada incertidumbre en esta materia, a diferencia de los acuerdos logrados con Canadá y México, que prevén largas y periódicas evaluaciones de múltiples aspectos durante la presidencia de Trump, siempre bajo la espada de Damocles de la imposición arancelaria. ¿Será?

*Profesor del Posgrado en Economía y coordinador del Centro de Estudios China-México de la UNAM