A más de dos meses para el 28J se calienta la campaña en Venezuela
Marcos Salgado
A dos meses y diez días de las elecciones presidenciales en Venezuela, los oponentes empiezan a desplegar su campaña. Este sábado fue la primera aparición en un mitin callejero del candidato de la MUD, Edmundo González, en La Victoria, cerca de Caracas. En la misma ciudad se concentró el chavismo, en lo que parece será la tónica de la campaña: medir fuerzas palmo a palmo.
La Victoria, en el estado Aragua, fue el lugar elegido por la oposición para la presentación en sociedad de la alianza sui géneris entre Edmundo González, el candidato de los partidos que conforman la Plataforma Unitaria Democrática (PUD) y la furibunda antichavista María Corina Machado. Ella fue la encargada de presentar al candidato ahora en carne y hueso, luego de varias tarimas en las que lo exhibió en un cartel de campaña, lo que valió el mote de «candidato pendón» del que difícilmente pueda desligarse en las próximas semanas.
González leyó un discurso de apenas cuatro páginas y a doble espacio, donde aseguró que fue escogido candidato gracias a los Acuerdos de Barbados entre el gobierno y la oposición y pidió organizarse para tener testigos de mesa en las elecciones del 28J.
Tres mensajes
En la tercera página de su discurso, el candidato pidió a la «comunidad internacional» que acompañe «de cerca» el proceso electoral y prometió que éste será «definitorio» para «reducir la migración y hacer de Venezuela un socio confiable».
Luego se dirigió a los que «aún creen en el gobierno» y aseguró que garantizaría «una alternancia en paz». En la misma línea envió un mensaje a la Fuerza Armada: «ustedes cumplen un papel fundamental en la seguridad de todos».
El contenido y el tono de este mensaje triple difiere del utilizado hasta ahora por la oposición de la PUD, y en particular por MCM, quien regularmente asegura que se harán del gobierno para «cobrarle» al chavismo, en un discurso que no suena a otra cosa que a (eventual) retaliación.
En la cuarta página, González abandonó los mensajes y apeló a las emociones. Leyó que pretende un país «donde sepas que tu dinero vale» y regresen a su casa de trabajar sabiendo que habrá agua y electricidad. También imaginó un país «en el que nuestros aeropuertos y fronteras se llenarán de nuestros hijos volviendo a casa».
Así, en lo que puede considerarse su discurso inaugural, González no hizo propuestas concretas ni se ocupó de presentarse como un candidato viable. Todo parece estar situado en el volátil terreno de las emociones. Aunque sí está claro que se separó del discurso belicista de MCM. ¿Táctica capta votos o cisma en puerta? Ya veremos.
Por ahora, González reveló que aceptó custodia del Estado, una noticia que hace ruido en las usinas terraplanistas del maricorinismo.
El chavismo, también en La Victoria y con esquema electoral
Mientras González enfrentaba su primera tarima, a pocas cuadras el oficialismo plantaba bandera, en un acto que encabezó Diosdado Cabello, un histórico del chavismo, jefe operativo del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), el partido que aporta el caudal electoral principal para la candidatura del presidente y candidato Nicolás Maduro.
Diosdado habló de la cercana convocatoria opositora: «al títere no le dieron suficiente cuerda, jamás van a darle la cara al pueblo en una manifestación”, dijo y remarcó: «ese es el candidato de los apellidos, de la burguesía, de los odiadores, de los vende Patria, de los que no le importa el destino de la Patria, es el candidato de los que pidieron sanciones».
El primer vicepresidente del PSUV llamó a aceitar la maquinaria electoral partidaria para “dar una batalla y lograr un triunfo contundente” el 28J.
“Todo el que ponga un nombre ahí, en su 1×10, tiene que asegurarse que esa persona vaya a votar. Todas las estructuras del PSUV deben tener registrado el 1×10. Si usted es militante, también debe tener su 1×10”, dijo Cabello. El 1×10 es un esquema electoral para garantizar el voto, que el PSUV ha usado con éxito en contiendas anteriores.
Faltan 70 días ¿Qué sigue?
La jornada del sábado en La Victoria aporta algunas pistas de lo que viene, cuando todavía está lejos el inicio formal de la campaña electoral. Por un lado, habrá que ver si la oposición de la PUD reserva a Edmundo González la imagen reposada y «democrática», para salir a la caza de los votos que puedan definir la elección del 28J, que no necesita mayorías absolutas ni segundas vueltas.
La principal enemiga de esa estrategia es MCM, quien sigue ocupando un lugar central en el esquema de la PUD. Referentes opositores confiesan en privado que la señora es un salvavidas de plomo y que la campaña de González no debe dejarla como protagonista.
Mientras tanto, el presidente-candidato Nicolás Maduro deberá seguir desdoblando funciones, para abarcar el amplio desafío de su segunda reelección consecutiva. Deberá mostrarse al frente del gobierno, en un espacio comunicacional que controla con comodidad, pero también deberá recorrer el país como candidato.
Una campaña que ya es, y seguirá siendo, un dolor de cabeza logístico, para un presidente sobre el que Estados Unidos mantiene una recompensa mercenaria. En esa línea, todo indica que la campaña electoral que empezó de hecho tendrá decenas de pequeños y medianos actos de masas, en donde habrá una batalla en redes para instalar quién muestra más músculo. Quién gana y quién pierde.
Esto recién empieza.
* Periodista argentino del equipo fundacional de Telesur. Corresponsal de HispanTV en Venezuela, editor de Questiondigital.com. Analista asociado al Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico (CLAE, estrategia.la)
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