Rubén Armendáriz-CLAE

Dice el escritor Santiago Varela que Argentina es un oxímoron, una figura retórica que consiste en complementar una palabra con otra que tiene un significado contradictorio, por ejemplo “un silencio ensordecedor”. Cuando el gobierno aumenta el transporte, las tarifas de los servicios públicos, los combustibles, dice que la inflación baja y que los jubilados podrán recibir menos dinero, pero ganarán más, es un oxímoron, insiste.

Muchos de los miembros del gabinete de Mauricio Macri tienen su dinero en los paraísos fiscales y dicen que no lo traerán de vuelta porque no le tienen confianza al país, aunque se la pasan declamando que están creando las condiciones para que lleguen inversiones extranjeras.

Es un país donde los que aún trabajan ganan salarios por debajo del nivel de pobreza, los jubilados son indigentes, el gobierno está contento de firmar un acuerdo stand by con el Fondo Monetario Internacional: es que Argentina tocó fondo y el “que se vayan todos” del 2001 es un fantasma que ronda las ciudades y los campos, de norte a sur y de este a oeste.

Pero, por favor, señor presidente ingeniero Mauricio Macri, no renuncie. Nadie soportaría que el país-oxímorom fuera gobernado por -la según su hoja de vida Licenciada en Relaciones Internacionales y Magister en Integración Regional- Gabriela “Gaby” Michetti, vicepresidenta, lisiada tras un accidente automovilístico, reconocida como uno de los drenadores de dineros públicos para fundaciones privadas. Otro oxímoron.

Sobre su discapacidad física se construyó su imagen pública, en la cima de las posiciones de la alianza Cambiemos, y parte esencial de un régimen político más que salpicado, embarrado por la corrupción, los Panamá Papers y cuentas off shore del presidente Macri y de varios integrantes de su gabinete ministerial, además de algunos intendentes y funcionarios territoriales.

Gaby Michetti, quien a fuerza de desatinos estridentes intenta demostrar que ni es un cero ni está a la izquierda, viajó en enero de este año a Israel. El grado de relevancia otorgado por la sociedad israelí (y su gobierno) a su visita quedó en evidencia en la total omisión periodística de su presencia. Ninguno de los cuatro diarios más importantes de Israel consignó su periplo.

El único trascendido, reproducido humorísticamente por las redes sociales tzabras (de los nativos israelíes), fue el referido a su afirmación de que “nuestro ordenamiento de la economía es admirado en todo el mundo”, que motivó comentarios humorísticos ligados a los altísimos índices inflacionarios y el liderazgo mundial (absoluto) en materia de endeudamiento externo percápita, recuerda Jorge Elbaum.

Más allá de sus viajes permanentes y cercanía a los gobiernos de Israel y Estados Unidos, Gaby es conocida por sus bloopers y metidas de pata, pero ni la prensa crítica-opositora se entretiene mucho con sus dichos.

Católica ferviente y afecta a tuitear mensajes “espirituales”, la entonces (2010) diputada Michetti quiso celebrar las Pascuas en la red: “Hoy es un día especial para mirarse hacia adentro y explorar cómo está el alma. Moría Jesús hace 2010 años y lo hacía por AMOR…”.  Luego de muchos reclamos de sus seguidores, llegó la retractación 16 minutos después: “Tienen razón todos los q me corrigieron!! Jesús no murió hace 2010 años, sino hace 1977 años…”.

El 29 de abril de 2018 lanzó un extraño análisis sobre la devaluación del dólar y dejó frases desopilantes sobre el grave rumbo de la economía. «De a poco nos vamos a ir acostumbrando con tener un dólar flotante (…) No se nos va a caer la vida porque el dólar suba uno o dos pesos (…) Empecemos a confiar un poco en nosotros mismos, es muy difícil que podamos seguir adelante».

Su visión de la Argentina que cogobierna, es muy distante a la realidad-real, pero coincide con la prensa hegemónica. Así explicó los profundos recortes al gasto público: “El país tiene una enorme dificultad en materia de recursos con un gran gasto público que genera una deuda anual de 600 mil millones de pesos».

Y defendió la agresión policial a los trabajadores: “Las fuerzas de seguridad actúan sacando a la gente como la tengan que sacar. Si no la pueden agarrar, viene el hidrante o sino balas de gomas en la pierna. Tenemos que dejarnos de embromar (…)  «Hay muchos dirigentes políticos y sociales que miran este cambio con mucho miedo porque si este país cambia para donde tienen que cambiar, no tienen cabida «.

El robo y las cajas negras

El juez Ariel Lijo investigó si Michetti incurrió en algún delito en torno al dinero (245.000 pesos argentinos y 50.000 dólares, supuestamente pertencientes a la Fundación SUMA que dirige Michetti, quien siempre insiste en la “transparencia”) robado de su casa el 22 de noviembre de 2015, el que nunca había sido declarado.  Una veintena de testigos coincidió en no haber percibido ningún recibo que comprobase sus aportes.

El abogado denunciante del origen del dinero robado, Leonardo Martínez Herrero, dijo que SUMA era una pantalla para recaudar dinero para la política y que podría tratarse de «un mecanismo para lavar dinero». Cuando le roban a Michetti ella dice que era de la Fundación y de la Fundación dicen que nunca entró el dinero, agregó.

Además, los balances de la fundación los «hicieron» dos semanas después que se presentó la denuncia penal. «El enriquecimiento ilícito de la vicepresidenta está comprobado. Miente cada vez que dice algo. Michetti está 100% comprometida en la causa», remarcó Martínez Herrero.

Además, en esta causa debieron declarar bajo juramento entre otros, el ministro de Modernización, Andrés Ibarra; el responsable de los Medios Públicos, Hernán Lombardi; el secretario de obras Públicas, Daniel Chain; la subsecretaria de Obra Pública Federal, Marina Klemensiewitz; el embajador en Uruguay, Guillermo Montenegro.

El juez Lijo ordenó levantar el secreto bancario sobre las fundaciones Pericles (del principal asesor judicial del Presidente, Fabián Rodríguez Simón); Formar, relacionada con el ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, y Fundar-Justicia y Seguridad, vinculada con el secretario de Seguridad, Eugenio Burzaco y reclamó a la Unidad de Información Financiera (UIF) información sobre la existencia de Reportes de Operaciones Sospechosas (ROS) de las tres fundaciones.

Gaby y la red Atlas, la internacional capitalista

El movimiento libertario de extrema derecha (en inglés libertarians), con extenso financiamiento (entre otros por los hermanos Koch): funciona a través de  un inmenso conglomerado de fundaciones, institutos, ONGs, centros y sociedades unidos entre sí por hilos poco detectables, entre los que se destaca la Atlas Economic Research Foundation, o la Red Atlas.

En el Foro Latinoamericano de la Libertad de la Red Atlas, de mayo de 2017 en el lujoso Brick Hotel de Buenos Aires, con presencia del presidente argentino Mauricio Macri y el escritor peruano-español Mario Vargas Llosa, se debatió cómo derrotar al socialismo en todos los niveles, desde las batallas campales en los campus universitarios hasta la movilización de un país para abrazar la destitución de un gobierno constitucional, como en Brasil.

Un joven argentino de una familia antiperonista, Alejandro Chafuen, es desde 1991 el líder de Atlas. Sucesivamente consiguió que Philip Morris contribuyera con donaciones regulares a Atlas, al igual que ExxonMobil y MasterCard, y que se sumaron a los donantes las fundaciones asociadas con el inversor John Templeton y los millonarios Charles y David Koch. Así comenzaron a florecer numerosas fundaciones y ONGs conservadoras.

Chafuen se iluminó cuando llegó Donald Trump a la presidencia. La administración de Trump está repleta de ex alumnos de grupos relacionados con Atlas como Sebastian Gorka, el asesor islamofóbico de contraterrorismo de Trump, el vicepresidente Mike Pence y la secretaria de Educación Betsy DeVos. Pero la figura principal del entramado es hoy Judy Shelton, quien se hizo cargo de la NED, tras ser consejera de la campaña de Trump. 

La Fundación Pensar era una rama de la Red Atlas en Argentina que se convirtió en el PRO, el partido político que llevó a la presidencia en 2015 a Mauricio Macri. Dirigentes de Pensar y de la Fundación Libertad –otra rama de la Red-, ocupan hoy cargos clave en la administración argentina. Pero hay una serie de fundaciones, dirigida por altos funcionarios de la administración Macri, que drenan dineros públicos hacia ellas, aumentando los fondos provenientes de la Red Atlas y la NED.

A esa red se deben sumar las fundaciones SUMA (dirigida por Michetti), Seguridad y Justicia (del secretario de Seguridad Eugenio Burzaco), Crecer y Crecer (del alcalde Néstor Grindetti), Formar (del ministro de Educación Guillermo Dietrich), Pericles (del asesor jurídico presidencial Rodríguez Simón).

La Procuraduría de la Criminalidad Económica y Lavado de Activos denunció en 2014 al ministro de Cultura Hernán Lombardi por el desvío de fondos públicos hacia Pensar. Asimismo, se denunció ante la justicia el “diezmo” que la dirigente macrista Gladys Rodríguez solicitaba a quienes accedían a empleos públicos en la Provincia de Buenos Aires, para engrosar los fondos de la misma fundación.

El Centro de Apertura y Desarrollo de América latina (CADAL) es asociado a la Network of Democracy Research Institutes, NDRI, y puso en marcha el Instituto Vaclav Pavel y Análisis Latino, que dirige el periodista Fernando Laborda (premio a los Jóvenes Líderes 2006 de la Red Atlas), todo con fondos proporcionados por la NED, vía la Red Atlas y por los dineros drenados desde el Estado argentino. (1)

Argentina tocó fondo y el “que se vayan todos” del 2001 ronda el imaginario de todo el país. En 2001 el estallido social ante la gravísima crisis hizo que el presidente Fernando de la Rúa huyera en helicóptero. Pase lo que pase, por favor, presidente Macri, no renuncie. Y si decide irse, por favor no olvide llevarse a su vice.

Nota

1) Con información de Red Atlas, libertarios de ultraderecha: entramado civil detrás de la ofensiva capitalista en Latinoamérica, de Aram Aharonian y Álvaro Verzi Rangel

* Periodista y politólogo uruguayo, asociado al Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico (CLAE, www.estrategia.la)

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EN PORTUGUÉS

Por favor Macri, não renuncie (salve-nos de Gaby)

Por Rubén Armendáriz

Diz o escritor Santiago Varela que Argentina é um paradoxismo, uma figura retórica que consiste em complementar una palavra com outra que tem um significado contraditório. Por exemplo, “um silêncio ensurdecedor”. Outro exemplo é quando o governo argentino aumenta os preços do transporte público, as tarifas dos serviços públicos (água, luz, gás, etc), e dos combustíveis, mas diz que a inflação está baixa e que os aposentados podem receber menos dinheiro, mas terminarão ganhando.

Muitos dos membros do gabinete de Mauricio Macri têm seu dinheiro nos paraísos fiscais, e dizem que não o trarão de volta porque não têm confiança no país, embora vivam dizendo que estão criando as condições para que os investimentos estrangeiros venham para a Argentina.

É um país onde os que ainda vivem do trabalho ganham salários por baixo do nível da pobreza, os aposentados são indigentes e o governo está satisfeito por assinar um acordo com o Fundo Monetário Internacional (FMI). A Argentina chegou ao fundo do poço, e o fantasma do “fora todos”, da época do corralito, em 2001, ronda tanto grandes quanto pequenas cidades, de norte a sul, de leste a oeste.

Mas, por favor, senhor presidente engenheiro Mauricio Macri, não renuncie. Ninguém suportaria que o país-paradoxo fosse governado pela – segundo seu currículo, licenciada em Relações Internacionais e Integração Regional – Gabriela Michetti, a “Gaby”, vice-presidenta conhecida como uma das pessoas que melhor sabe drenar dinheiro público para fundações privadas. Outro paradoxismo.

Michetti é deficiente física, desde que sofreu um acidente automobilístico, em 2002. A partir dessa situação, ela construiu uma imagem pública que é parte essencial do regime político que está com mãos e pés enfiados na corrução, em casos como o dos Panamá Papers e outros envolvendo contas offshore do presidente Macri e de vários integrantes do seu gabinete ministerial – além de alguns intendentes regionais e funcionários territoriais.

Gaby Michetti tenta demonstrar, através de desatinos estridentes, que não é um zero nem está à esquerda, e viajou em janeiro à Israel. O grau de relevância outorgado pela sociedade israelense (e seu governo) à sua visita ficou em evidência na total omissão jornalística de sua presença. Nenhum dos quatro diários mais importantes de Israel citou sequer minimamente sua presença no país.

O único transcendido, reproduzido humoristicamente pelas redes sociais tzabras (dos nativos israelenses), foi o referente à sua afirmação de que “nossa (dos argentinos) organização econômica é admirada no mundo todo”, o que motivou comentários humorísticos ligados aos altíssimos índices inflacionários e a liderança mundial (absoluta) em matéria de endividamento externo per capita.

Sem contar suas viagens permanentes e proximidade com os governos de Israel e Estados Unidos, Gaby também é conhecida por suas gafes, mas nem a imprensa crítica-opositora se diverte muito com suas declarações.

Católica fervorosa e dedicada a tuitar mensagens “espirituais”, como em 2010, quando a então deputada Michetti quis celebrar as Páscoa na rede dizendo: “hoje é um dia especial para nos vermos por dentro e explorar como está a alma. Morria Jesus, há 2010 anos e o fazia por AMOR…”.  Depois de muitas reclamações de seus seguidores, chegou a correção: “vocês têm razão, Jesus não morreu há 2010 anos, e sim há 1977 anos”.

No dia 29 de abril de 2018, ela lançou uma estranha análise sobre a desvalorização do dólar, deixando uma coleção de frases tolas sobre o grave rumo da economia. “Aos poucos nós vamos nos acostumando a ter um dólar flutuante (…) A vida não vai acabar porque o dólar subiu um ou dois pesos (…) Comecemos a confiar um pouco em nós mesmos, se não é muito difícil que podamos seguir em frente».

Sua visão da Argentina da qual ela é cogovernante está muito distante da realidade-real, mas coincide com a contada pela imprensa hegemônica. Ela explica assim os profundos cortes do gasto público: “o país tem uma enorme dificuldade em matéria de recursos, com um grande gasto público que gera uma dívida anual de 600 bilhões de pesos”.

E defendeu a agressão policial aos trabalhadores: “as forças de segurança atuam prendendo as pessoas que tem que prender. Se não pode agarrá-las, tem que usar balas de borracha na perna. Temos que deixar de ser ingênuos (…) há muitos dirigentes sociais que olham para essas mudanças (impulsadas pelo governo) com muito medo, porque se este país muda para onde tem que mudar eles já não terão espaço”.

O roubo e as caixas pretas

O juiz Ariel Lijo investigou se Michetti cometeu algum delito a respeito do dinheiro (245 mil pesos argentinos e 50 mil dólares, supostamente pertencentes à Fundação SUMA, dirigida por Michetti, que sempre insiste na “transparência”) roubado da sua casa no dia 22 de novembro de 2015, e que nunca havia sido declarado. Dezenas de testemunhas asseguraram que nunca houve nenhum recibo que pudesse comprovar que esse dinheiro foi entregue em forma de doação.

O advogado que denunciou a origem do dinheiro roubado, Leonardo Martínez Herrero, disse que a SUMA era uma fachada para arrecadar dinheiro para a política, e que poderia se tratar de “um mecanismo para lavar dinheiro”. “Quando foi noticiado o roubo de Michetti, ela disse que era da Fundação, mas na Fundação dizem que o dinheiro nunca entrou”, conta.

Além disso, os balanços da fundação foram “feitos” duas semanas depois de apresentada a denúncia penal. “O enriquecimento ilícito da vice-presidenta está comprovado. Mente cada vez que diz algo. Michetti está 100% comprometida na causa”, afirma Martínez Herrero.

Na mesma causa, tiveram que declarar, entre outros, o ministro de Modernização, Andrés Ibarra, o responsável pelos Meios Públicos, Hernán Lombardi, o secretário de Obras Públicas, Daniel Chain, a subsecretária de Obras Públicas, Marina Klemensiewitz e o embaixador no Uruguai, Guillermo Montenegro.

O juiz Lijo ordenou a quebra do sigilo bancário sobre as fundações Pericles (do principal assessor judicial do Presidente, Fabián Rodríguez Simón) Segurança e Justiça (vinculada com o secretário de Segurança Eugenio Burzaco), e Formar (relacionada com o ministro de Transporte, Guillermo Dietrich), e pediu à Unidade de Informação Financeira (UIF) as informações sobre a existência de um Reportes de Operações Suspeitas (ROS) das três fundações.

Gaby e a Rede Atlas, a internacional capitalista

O movimento libertário de extrema direita, com enorme financiamento (entre outros, pelos irmãos Koch) funciona através de um imenso conglomerado de fundações, institutos, ONGs, centros e sociedades, unidos entre si por conexões pouco detectáveis, entre as que se destaca a Atlas Economic Research Foundation, ou Rede Atlas.

No Foro Latino-Americano da Liberdade, organizado pela Rede Atlas em maio de 2017, no luxuoso Hotel Brick de Buenos Aires, com a presença do presidente argentino Mauricio Macri e do escritor peruano-espanhol Mario Vargas Llosa, o principal tema de debate foi como derrotar o socialismo em todos os níveis, desde as batalhas campais nos centros acadêmicos das universidades, até a mobilização de um país para abraçar a destituição de um governo constitucional, como aconteceu no Brasil.

Alejandro Chafuen, um jovem argentino de família antiperonista, é desde 1991 o líder da Rede Atlas. Ele conseguiu fazer com que a Philip Morris contribuísse com doações regulares à Atlas, assim como a ExxonMobil e a MasterCard. Com o tempo, se somaram outros doadores, como fundações e investidores do porte de John Templeton e os milionários Charles e David Koch. Assim começaram a florescer numerosas fundações e ONGs conservadoras.

Chafuen se iluminou quando Donald Trump chegou à presidência. A administração de Trump está repleta de ex-alunos de grupos relacionados com a Atlas, como Sebastian Gorka, o assessor islamofóbico de contraterrorismo de Trump, o vice-presidente Mike Pence e a secretária de Educação, Betsy DeVos. Mas a principal figura ligada à Rede e presente hoje ao presidente estadunidense é Judy Shelton, que assumiu a NED, após ser conselheira de campanha de Trump.

A Fundação Pensar, sediada na Argentina, era um dos braços da Rede Atlas no país, que com o tempo se transformou no PRO, o partido político que levou Macri à presidência em 2015. Dirigentes da Pensar e da Fundação Liberdade – outro braço da rede – hoje ocupam cargos importantes na administração argentina. Mas há uma série de fundações administradas por altos funcionários do governo de Macri que drenam verbas públicas, aumentando os fundos provenientes da Rede Atlas e da NED.

Também estão ligadas à rede as fundações SUMA (dirigida por Michetti), Segurança e Justiça (do secretário de Segurança, Eugenio Burzaco), Crescer & Crescer (do prefeito do município de Lanús, Néstor Grindetti), Formar (do ministro de Educação, Guillermo Dietrich) e Pericles (do assessor jurídico presidencial, Rodríguez Simón).

A Procuradoria da Criminalidade Econômica e Lavagem de Ativos denunciou em 2014 ao ministro da Cultura Hernán Lombardi pelo desvio de fundos públicos à Pensar. Também foi denunciado à Justiça o “dízimo” que a dirigente macrista Gladys Rodríguez solicitava àqueles que obtiveram empregos públicos na Província de Buenos Aires, para engrossar os fundos da mesma fundação.

O Centro de Abertura e Desenvolvimento da América latina (CADAL) está associado à Network of Democracy Research Institutes (NDRI), e impulsou o Instituto Vaclav Pavel de Análise Latina, que é dirigido pelo jornalista Fernando Laborda (prêmio aos Jovens Líderes 2006 da Rede Atlas), tudo isso financiado com fundos proporcionados pela NED, via Rede Atlas e pelos recursos drenados do Estado argentino.

A Argentina chegou ao fundo do posso e o “fora todos” de 2001 ronda o imaginário de todo o país. Em 2001, o colapso social diante da gravíssima crise fez com que o presidente Fernando de la Rúa fugisse do cargo de helicóptero. Aconteça o que acontecer, presidente Macri, não renuncie. E se decide ir, por favor não se esqueça de levar a sua vice.

Rubén Armendáriz é jornalista e cientista político uruguaio, analista do Centro Latino-Americano de Análise Estratégica (CLAE)
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